Moción de censura

Abascal carga contra el PP en la presentación de la moción de censura: "Vox no es el enemigo a abatir"

El líder de Vox cuestionó con dureza a Alberto Núñez Feijóo en su discurso de presentación de la moción de censura. Tamames no aplaudió sus palabras.

Ramón Tamames nunca imaginó que a poco de cumplir 90 años iba a ingresar al Congreso de los Diputados cual estrella de rock para intentar destituir al presidente del Gobierno. A las 8.55 entró al Hemiciclo del brazo de Santiago Abascal, el más inesperado hijo pródigo de su extensa vida política.

Rodeado de una marea de fotógrafos, el ex dirigente comunista caminó a paso lento con su bastón, subió las escalinatas con ayuda y se sentó, con un resoplo de cansancio, en el primer escaño de la bancada de la ultraderecha.

Una vez acomodado, Iván Espinosa de los Monteros le acercó una bandera de España. Javier Ortega Smith le estrechó la mano con fuerza y Abascal, ya acomodado a su lado, le explicó como usar el micrófono. 

Vox se arrepiente de la moción de censura y Feijóo le dice a Abascal que no le apoyará

Luego, ya con Pedro Sánchez y sus ministros sentados en sus escaños azules, llegó el momento de la presentación de la moción de censura, la segunda que Vox propone durante esta legislatura, la segunda que Abascal saldrá derrotado, la segunda impugnación al presidente de Gobierno en la que la extrema derecha no tendrá el apoyo del PP, su hipotético socio de coalición en el anhelo por entrar en La Moncloa. 

Abascal dedicó gran parte de su discurso, justamente, a cuestionar la actitud de los populares. Los dardos a Sánchez eran más que esperados. En sus más de 30 de oratoria repasó todas las medidas de un Ejecutivo "decadente" y de un "líder caducado". 

Pero las afiladas esquilar contra el PP y su líder, Alberto Núñez Feijóo, fueron igual o más profundas. Abascal acusó a Génova de propagar los mismos motes que el PSOE utilizó para deslegitimar la moción de censura: "circo, broma, comedia bufa, tertulia televisiva".

Les pedimos que vuelvan a recuperar la sensatez y la seriedad. Si quieren ocupar el espacio de una socialdemocracia seria, los felicito. Pero díganlo. Lo cierto es que hoy pueden recuperar la dignidad. Le pedimos que votemos juntos y que nos entendamos mañana

"Quiénes más ha repetido estas palabras han sido los diputados del PP. Para pactos con Sánchez están los otros diputados, los que ya han convertido esta legislatura en un mercadillo. Deben saber que si quieren pactar con el PSEO se van a tener que poner a la cola. Están en su derecho. Pero sus electores tienen derecho a saber el motivo verdadero por el cual no apoyan esta moción censura", cuestionó.

Tamames desmiente a Vox y Abascal teme que la moción de censura se salga de control

Y prosiguió con gesto adusta y con la mirada clavada a la bancada liderada por Feijóo, ausente en el debate (a la hora del debate estaba reunido en la Embajada de Suecia en Madrid con los embajadores de la Unión Europea): "Señores del PP, Vox no es enemigo a a abatir. Nos ha dejado perplejo esta postura. Señores del PP estamos aquí para representar a los españoles. Tenemos el deber de dejar los cálculos, miedos y medias verdades. Tenemos el deber de enfrentar a este gobierno y a las legislación extremista de los socialistas. Si no quieren están en su derechos, pero quienes los votaron tienen que saberlo". 

El candidato de la moción de censura, el profesor y economista Ramón Tamames. 

Abascal le aclaró a Feijóo que no se pueden "acercar al PSOE y a Vox al mismo tiempo". "No se puede. No es serio", reprochó.

"Les pedimos que vuelvan a recuperar la sensatez y la seriedad. Si quieren ocupar el espacio de una socialdemocracia seria, los felicito. Pero díganlo. Lo cierto es que hoy pueden recuperar la dignidad. Le pedimos que votemos juntos y que nos entendamos mañana", bramó.

Tras enumerar los motivos de la moción de cesura (las políticas durante la pandemia, las políticas de género, las políticas económicas, etc.), el líder de Vox cerró su discurso con otra carga hacia el PP. 

"La moción de censura solo servirá para que Vox sume minutos en el telediario" 

"Señores de las oposición: ¿No están de acuerdo con estas dos premisas, censurar el gobierno y elecciones anticipadas? ¿Cuál es el motivo para no apoyarlas?", se preguntó.

Y le pidió a Génova, a quien calificó de "secuestrar la soberanía", que deje a sus diputados votar con libertad y según sus convicciones. "Habrá dos opciones al finalizar este debate: o elecciones inmediatitas o medio año interminable con este gobierno".

Solo los 51 diputados de Vox aplaudieron de pie a su líder, no así Tamames, que, inmutable, no juntó sus palmas.