Crece la presión para que Kari Lake abandone la pelea judicial en Arizona y se decida a ser la vice de Trump
Aunque perdió las elecciones de noviembre pasado en Arizona, la ex candidata republicana a gobernadora Kari Lake sigue siendo protagonista de la política. El nombre de la ex presentadora de Fox News en Phoenix volvió a ganar repercusión durante el fin de semana pasado, cuando durante la cumbre de conservadores de la CPAC que tuvo como estrella a Donald Trump ella se convirtió en la candidata más votada para ser su compañera de fórmula en 2024.
En el encuentro que reunió a los fanáticos republicanos que adoran al ex presidente, Lake obtuvo el primer puesto como eventual candidata a vicepresidente con el 20 % de los votos, seguida por el gobernador de Florida, Ron DeSantis y la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, dos de los más firmes desafiantes de Trump.
La reaparición de Lake sumó un nuevo capítulo este martes cuando un artículo de Axios aseguro que figura bien arriba en la lista selecta de cuatro mujeres que Trump evalúa como compañeras de fórmula. Parte de una actuación o de una pelea que insiste en dar pese a los malos resultados, Lake salió este miércoles a ratificar su apoyo incondicional a Trump pero se negó a abandonar la pelea judicial por la gobernación de Arizona.
La ex candidata del Partido Republicano aseguró que aún no desiste de obtener en los tribunales lo que no consiguió en las urnas. "Estoy 100 % dedicada a servir como gobernadora de Arizona", le dijo Lake al Daily Mail. "También trabajaré para asegurarme de que el presidente Trump vuelva a la Casa Blanca lo antes posible. Pero cualquier cosa fuera de esos dos objetivos no es más que una distracción", agregó. En una réplica exacta de lo que sucedió a nivel nacional después de la derrota de Trump en las presidenciales de 2020, Lake niega la legitimidad de la gobernadora demócrata Katie Hobbs y sigue declarándose vencedora cuatro meses después de las elecciones de medio término.
Aunque Hobbs juró como gobernadora a principios de enero y está en funciones desde entonces, Lake se empeña en la batalla judicial. Según publicó The Epoch Times, está previsto que la Corte Suprema de Arizona examine en las próximas semanas la demanda de Lake relacionada con las elecciones de mitad de período. Lak cuestiona los resultados de los colegios electorales del condado de Maricopa y sostiene que fueron tan graves que las elecciones deberían repetirse o que ella debería ser directamente declarada ganadora.
Kari Lake abraza a Trump. Su carisma la posiciona entre las preferidas del ex presidente.
Lake no tiene los mejores augurios para su pelea en Arizona, pero su lucha por convertirse en la mejor alumna de Trump la mantiene centrada en la contienda legal. Dos tribunales inferiores de Arizona desestimaron previamente su impugnación de las elecciones de noviembre. En ambas sentencias, los jueces argumentaron que Lake no aportó pruebas suficientes para demostrar que se suprimieron votantes republicanos el día de las elecciones.
Sin embargo, la ex candidata a gobernadora parece decidida a ser protagonista de lo que viene junto a Trump. "Nuestros mejores días están por delante y todo comienza con la elección de candidatos America-First (Estados Unidos Primero) en todo el país", le dijo Lake al Daily Mail.
Esta semana, un artículo de Axios afirmó que Trump está considerando a Lake como candidata a la vicepresidencia junto a Haley, la gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, y a la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, dice el artículo de Axios. Durante la CPAC, Trump arrasó en la encuesta presidencial del grupo, superando a DeSantis -el número 2- por unos 40 puntos porcentuales. Trump obtuvo el 62%, DeSantis el 20% y el empresario Perry Johnson el 5%.