Exclusivo: Fuerte pelea política en Rosario para nombrar al jefe de los fiscales que investigan a los narcos
Una pelea clave tensiona por debajo de la superficie a la política santafesina: la designación del jefe de los fiscales que tienen a su cargo la lucha contra el narco, que tiene a Rosario contra las cuerdas.
Desde el primero de Mayo, el Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe deberán contar con nuevas autoridades y su designación disparó una lucha palaciega por el control del organismo que investiga los delitos penales y diseña las políticas de persecución criminal. En definitiva, la tarea de poner tras las rejas a los integrantes de bandas narco que asolan Rosario.
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Según el perfil que tengan el Fiscal General, (jefe de los fiscales de toda la provincia) y los Regionales (Santa Fe está dividida en cinco), dependerá la dinámica que asuma una de las instituciones más importantes para el hasta ahora fallido combate al narco.
Entre otras prerrogativas claves, los jefes de los fiscales fijan las pautas para que las investigaciones de los fiscales sigan o no determinadas líneas de investigación, así como que tanto se avanza cuando las pistas conducen a nombres importantes del poder económico y político.
Por eso, la elección para reemplazar al saliente fiscal General, Jorge Baclini, abrió una fuerte puja entre el poderoso ministro de la Corte Suprema provincial, Rafael Gutiérrez, y el diputado radical y armador de la candidatura de Carolina Losada, Julián Galdeano.
El primero, alienta la elección del santafesino Roberto Prieu Mántaras, mientras que el dirigente de la UCR a Javier Beltramone. Se trata de dos camaristas con años en la justicia penal pero que representan proyectos muy distintos para el futuro del Ministerio Público de la Acusación (MPA), según quedó expuesto en las entrevistas del concurso.
Jorge Baclini, el saliente fiscal General de Santa Fe.
Prieu Mántaras, quien tiene un vínculo con Gutiérrez de más de cinco décadas, es un funcionario ligado a los factores de poder de la capital provincial y en los pasillos de Tribunales lo recuerdan como uno de los camaristas que en 2011 le anularon la sentencia a monseñor Storni, un ex obispo que había sido condenado a ocho años por el delito de abuso sexual a un seminarista y que por ello fue obligado a renunciar a la Iglesia.
En su exposición ante el tribunal del concurso, el juez de 68 años fue muy crítico del Ministerio Público de la Acusación y del rol en que tuvo en estos últimos años basándose en déficit reales de la institución. Sin embargo, su presentación dejó entrever que se inclina por una fiscalía que no aborde la política criminal sino que se limite a la investigación de la flagrancia y el delito en su sentido más reducido, sin profundizar en los entramados mafiosos que existen en Rosario, según detalló a LPO un importante funcionario judicial al tanto de lo conversado en las audiencias.
"Prieu Mántaras tiene una impronta muy formalista, como la que tienen la mayoría de los judiciales de la ciudad de Santa Fe. Está muy bien que se preserven las formas procesales porque significan el respeto de las garantías. El riesgo es que ese formalismo impida avanzar", agregó a LPO un abogado del foro rosarino, que conoce bien al camarista.
Prieu Mántaras cuenta con el respaldo de Gutiérrez y del peronismo ortodoxo santafesino y en la vereda de enfrente pulsea otro camarista, el juez rosarino Javier Beltramone, que tiene el aval del diputado provincial, Julián Galdeano, el radical que lanzó a la política a Carolina Losada.
Ahora, frente a la indefinición de la ex periodista sobre si competirá por la gobernación de Santa Fe como pretende Galdeano, el radical santafesino busca poner un pie en la justicia a través de Beltramone. El intendente Pablo Javkin vería con buenos ojos su designación porque es rosarino y el criterio geográfico pesa mucho en la provincia.
La tercera propuesta que se elevaría el Consejo de la Magistratura, según confiaron a LPO fuentes al tanto del proceso, es la de María Cecilia Vranicich, actual auditora de gestión del MPA, y muy cercana al socialismo, sobre todo, al ex gobernador Antonio Bonfatti.
El diputado radical, Julián Galdeno, principal armador político de Carolina Losada en Santa Fe.
Luego que el Consejo eleve las ternas, será el turno del gobernador Omar Perotti, quien deberá elegir al nuevo Fiscal General y a los cinco regionales. Una vez cumplido ese paso, deberá girar los nombres a la Legislatura provincial para que los apruebe. Si las Cámaras no lo tratan por desacuerdos políticos con la designación, quedan nombrado fictamente. "Sería un escándalo mayúsculo", alertó a LPO un abogado al tanto de las negociaciones detrás del concurso.
Por ahora, el gobernador Perotti no ha dado señales sobre cual es su preferencia, aunque en círculos políticos de Rosario se comenta que se sentiría más cómodo eligiendo alguien del centro de la provincia.
Si la puja de poder entre Galdeano y Gutiérrez se empareja, podría salir beneficiada Vranicich que además, le permitiría al gobierno provincial argumentar sobre su defensa de la equidad de género.
También se menciona al fiscal antinarco Luis Schiappa Pietra aunque en círculos políticos lo descartan porque tiene no pasaría el filtro del Senado provincial, por sus acusaciones contra el senador peronista, Armando "Pipi" Traferri, investigado en su momento por supuestos vínculos con el juego clandestino.
Los fiscales anti narco, Schiappa Pietra y Edery.