Brasil

El bolsonarismo vacía la caja de Petrobras antes que asuman los funcionarios de Lula

El directorio nombrado por la gestión bolsonarista decidió distribuir casi 7 mil millones de dólares entre los accionistas. Lula solo puedo nombrar al presidente pero el nuevo directorio asume en abril.

Petrobras acaba de anunciar la distribución 35.800 millones de reales  (US$6.900 millones) entre los accionistas como recompensa a los inversionistas que mantuvieron sus acciones a pesar de las preocupaciones acerca de la posible  intervención política de Lula. Pero que podía leerse como un gesto del presidente al mercado para calmar temores, en realidad es una jugada del bolsonarismo antes del cambio de directorio. 

El único cambio que hizo Lula desde que asumió es el del presidente, Jean Paul Prates, pero el Consejo sigue estando bajo el control de la directiva que eligió la gestión anterior. Una fuente que conoce de cerca el mercado energético brasileño explicó a LPO que  "la junta cambiará en abril. El gobierno de Lula incluso eligió los nombres de los asesores. Se cree que estos nuevos miembros priorizarán la reinversión de las ganancias en la empresa en lugar de distribuirlas entre los accionistas". 

Una fuente que conoce de cerca el mercado energético brasileño explicó a LPO que "la junta cambiará en abril. El gobierno de Lula incluso eligió los nombres de los asesores. Se cree que estos nuevos miembros priorizarán la reinversión de las ganancias en la empresa en lugar de distribuirlas entre los accionistas

Prates criticó a la gerencia anterior por pagar dividendos récord sin invertir en energías renovables y expansiones de refinerías. Con esta decisión, la empresa brasileña se convirtió en el segundo mayor pagador de dividendos en la industria petrolera detrás de Saudi Aramco, según datos publicados por la agencia Bloomberg.  

El especialista en energía Bruno Empiro explicó a LPO que "para analizar la gestión de Bolsonaro en Petrobras hay que dividirla en dos. Creo que las elecciones estratégicas y los directorios eran buenos para la época".  

"La empresa estaba muy endeudada y no tenía grado de inversión. Así que hizo lo que tenía que hacer, que era reducir costos e invertir mucho en lo que era rentable; en este caso, el Presal. Pero los cambios bruscos de presidentes para tratar de cambiar artificialmente el precio de los combustibles fue muy dañino", agregó. 

La gestión de Petrobras durante el gobierno de Temer fue muy buena. El gobierno de Bolsonaro solo continuó en Petrobras lo que funcionaba en el gobierno de Temer. Hoy, Petrobras tiene sus cuentas correctas

Empiro asegura que "la gestión de Petrobras durante el gobierno de Temer fue muy buena. El gobierno de Bolsonaro solo continuó en Petrobras lo que funcionaba en el gobierno de Temer. Hoy, Petrobras tiene sus cuentas correctas". "La empresa ahora puede pensar en cambiar su estrategia e invertir más fuera del Presal únicamente. Como en las renovables, por ejemplo", culminó.

Una fuente que se desempeña como gestos de fondos de una de las cinco principales instituciones financieras del país dijo a LPO que "es innegable que después del impeachment contra Dilma se hizo un trabajo corporativo muy bueno, fue tomada como una empresa privada que maximizó los dividendos de sus accionistas. Tiene un costo fijo muy alto, por eso ya no tiene sentido extraer petróleo o invertir en las plataformas". "Yo, ahora, no pondría un centavo en Petrobras pero la empresa no tiene ninguna necesidad de distribuir ese dinero de dividendos. ¿Para qué? ¿Para enriquecer gente? La empresa necesita una inversión de capital intensivo alto y, por ende, precisa acceso al mercado de capitales", añade. 

Para el PT se trata de una maniobra de la gestión anterior para evitar el cambio de rumbo que se viene en la empresa a partir de la toma de control total de parte del gobierno de Lula.