Economía

Texas duplica su promedio histórico de empleo y crea 650 mil puestos de trabajo en un año

Supera a California y Florida. La migración externa pero también interna, como gran motor del crecimiento. El impacto de una posible recesión.

La Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos acaba de darle a Greg Abbott un nuevo motivo para promocionar al estado que gobierna desde hace 8 años. Los datos del empleo en los últimos 12 meses confirmaron a Texas como una locomotora que crece a una velocidad incomparable y genera más empleo que nadie.

Las cifras oficiales que acaban de difundirse son concluyentes. Durante 2022, Texas agregó 650,100 empleos, un logro que ningún otro estado es capaz de igualar y que además es más del doble de su propio promedio histórico en la materia.

A la salida de la pandemia, Texas aumentó los empleos a un ritmo del 5 % anual, una tasa de crecimiento que la convirtió en líder nacional y superó por mucho el crecimiento de empleos del 3 % que registró la economía a nivel nacional. Así, el Estado de la Estrella Solitaria superó a otras grandes economías como las de California, Florida, Nueva York y Pensilvania.

La economía de Texas vuelve a crecer al 8,2% y Abbott busca que su tercer mandato sea el mejor

Las estadísticas oficiales confirman una vez más que la dinámica de Texas es particular y se distingue del resto del país. Si en gran parte de los Estados Unidos el crecimiento económico está limitado por la escasez de mano de obra, en el estado que gobiernan los republicanos la fuerza laboral se sigue expandiendo gracias a una migración que viene desde otros países pero también de otros estados.

Como si tuviera un imán, la región de Dallas-Fort Worth creció incluso más rápido que el estado y alcanzó una escala de 5,9 % en el año. De acuerdo a la Comisión de la Fuerza Laboral de Texas, esa fue la tasa de crecimiento más rápida entre las grandes áreas metropolitanas. El norte de Texas registró un aumento neto de 235,200 puestos de trabajo, desestacionalizado. Es más del doble de la ganancia promedio en los años previos a la pandemia e iguala el total de la región en 2021, cuando la economía se estaba recuperando de una pérdida de más de 100,000 puestos de trabajo durante el primer año de pandemia.

Dallas-Fort Worth agregó más empleos el año pasado que 46 estados y representó el 36% de las ganancias netas de Texas. Los analistas coinciden en que ese crecimiento dispara un círculo virtuoso: atrae a más empresas, crea más empleos, atrae a más trabajadores, fomenta el aumento de la población y contribuye a un mercado de consumo en auge.

Por las posibilidades que ofrece para empresas e inquilinos, Texas se convirtió en los últimos tiempos en un lugar que recibe migrantes desde lugares como California, Florida y Nueva York. Muchos de ellos son además profesionales altamente calificados.

Newsom pierde una batalla crucial con Abbott: cada vez son más los californianos que se mudan a Texas 

Según un informe de Dallas Morning News, la industria del petróleo y el gas de Texas ha agregado un impulso considerable a la economía a partir de la guerra en Ucrania y hoy el estado republicano tiene en funcionamiento unas 100 plataformas petroleras más que hace un año. El sector minero y maderero de Texas, que incluye el negocio del petróleo y el gas, representa el corazón del crecimiento del empleo: agregó más de 40.000 puestos de trabajo el año pasado, una ganancia anual del 21%, cuatro veces más alta que la tasa de crecimiento del estado.

De todas maneras, las altísimas cifras del año pasado bien podrían revisarse a la baja después de que la Oficina de Estadísticas Laborales compare los totales en los próximos meses. El mes pasado, el Banco de la Reserva Federal de Dallas, que tiene su propio método para comparar y ajustar las estimaciones de empleo, hizo una importante revisión a la baja en el crecimiento de Texas.

Además, la mayoría de los economistas esperan una desaceleración significativa en el crecimiento del empleo en Texas, debido tanto a los obstáculos nacionales como al ritmo acelerado de los dos años anteriores. Eso llevaría a que los puestos de trabajo se mantengan en alza pero en un nivel mucho más bajo, de alrededor de un 2% este año. Esa desaceleración afectaría especialmente el empleo en las empresas que se beneficiaron del rápido crecimiento de Texas en rubros como bienes raíces, finanzas y construcción.