Perú

Fujimorazo: Castillo cerró el Congreso y dice que intervendrá el Poder Judicial

Horas antes que debatiera su destitución, el presidente peruano decidió disolver el Parlamento y anunció el inicio de un proceso constituyente en un plazo no mayor a 9 meses. Expectativa por el rol de las Fuerzas Armadas.

En medio de las tensiones por un nuevo debate para destituirlo, Pedro Castillo ordenó el cierre del Congreso y la imposición del toque de queda en todo el territorio. El presidente peruano hizo el anuncio por cadena nacional y aclaró que se trata de una disolución temporal pero tanto los medios locales como la política lo calificaron rápidamente como "golpe de estado" o "fujimorazo". 

Castillo dijo: "convocar en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso se gobernará mediante decretos ley".

Castillo se aferra a la OEA para evitar un nuevo intento de destitución en Perú

"En atención al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país tomamos la decisión de establecer un gobierno de excepción orientado a establecer el Estado de derecho y democracia, a cuyo efecto se dictan las medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional", agregó.

El líder peruano también anticipó que haría una reorganización el sistema de justicia: el Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia, el Tribunal Constitucional. 

Convocar en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso se gobernará mediante decretos ley

Además, planteó que todos los que poseen armamento ilegal deberán entregarlo a la Policía Nacional en plazo de 72 horas. "Quien no lo haga comete delito sancionado con pena privativa de la libertad que se establecerá en el decreto ley", advirtió. 

AMLO calificó al congreso peruano de "grosero y anti diplomático" por la negativa a Castillo

La semana pasada, la OEA finalizó una misión donde cuestionó al Congreso, declaró que la institucionalidad democrática peruana "está en riesgo" y pidió una tregua por la gobernabilidad. Castillo se aferró a este informe para denunciar el intento de destitución y ahora aclaró que le informará al organismo los pasos a seguir. 

Fuentes muy cercanas a la situación aseguran que "el golpe no se puede sostener. Ya hay ministros renunciando, la población no apoya y seguramente las Fuerzas Armadas no se van a plegar".

La relación de Castillo con el Congreso es muy mala. A la persistencia por destituirlo se le suma la decisión de no permitirle viajar a diversas actividades y cumbres diplomáticas y el veto constante a sus funcionarios. El último episodio fue la negativa para asistir a la Cumbre del Pacífico que generó el enojo del mexicano, Andrés Manuel López Obrador, uno de sus más acérrimos defensores. 

El antecesor de Castillo, Martín Vizcarra, también decidió cerrar el Congreso ante la obstrucción de la oposición. En ese momento aplicó el artículo 134 y convocó a nuevas elecciones legislativas. 

El presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Morales Saravia, denunció que la decisión de Castillo es una "ruptura del orden constitucional" y convocó a las Fuerzas Armadas a restaurar el orden. La vicepresidente peruana, Dina Boularte, también rechazó la decisión presidencial y consideró que "agrava la crisis institucional".