Encuesta

El PSOE frena la fuga de votos y se acerca a la mayoría absoluta con sus socios

El barómetro de la agencia 40dB indica que los socialistas cierran el año con un marcado crecimiento en intención de voto. Recuperan apoyos transferidos al PP y le muerden electorado a Podemos.

Los últimos sondeos del año le sonríen al Gobierno. El PSOE obtiene su mejor resultado en todo el 2022 y araña por primera vez una mayoría absoluta junto a sus actuales socios. La clave: los socialistas frenan la transferencia de votos y recuperan un porcentaje importante de los apoyos fugados al PP. LPO adelantó que este botín es el que Pedro Sánchez quiere reconquistar con su giro al centro en 2023.

Según el barómetro de diciembre de la agencia de 40db, el PSOE (27,8%) y el PP (28,1%) están hoy en un virtual empate técnico en intención de voto. A Génova no le alcanzaría las papeletas de Vox para formar gobierno, mientras que Ferraz estaría en condiciones de revalidar un Ejecutivo de coalición. La suma de todos los grupos parlamentarios de izquierda roza la mayoría absoluta.

El "efecto Feijóo" -el impacto positivo que generó el liderazgo del caudillo gallego- empieza a desinflarse, según este sondeo. El PP cae del 29,9% al 28,1% en solo cuatro semanas, lo que se traduce en siete escaños. Con estos números, el partido está solo tres puntos por encima de la estimación de voto de principio de año, cuando el timón estaba en manos de Pablo Casado.

Sánchez aparca su giro a la izquierda y vuelve al centro para recuperar los votos fugados al PP

Ambos movimientos -el crecimiento del PSOE y el retroceso del PP- se explican al analizar, en detalle, la transferencia de votos. Los populares ya no cazan tantos apoyos de Vox como meses atrás (de un 20% a un 9%).

En octubre, cuatro de cada diez votantes que se habían elegido la papeleta socialista en 2019 cambiaban su preferencia electoral. En diciembre el porcentaje se redujo. El PSOE retiene casi el 69% de sus apoyos. 

Sánchez, gracias a su giro a la izquierda de los últimos meses, también empieza a morderle electorado a Podemos, su aliado de gobierno. El 13% de los ciudadanos que en las últimas elecciones votaron a la formación morada hoy eligen al partido de la rosa. En octubre era del 8%

Lo más grave para la formación de Pedro Sánchez es que parte de esa fuga está yendo a la derecha: el 7,5% (unos 500 mil votantes) al PP y el 3,6% a Vox. Ahora, las cifras se han reducido: 5,1% y 2,3%, respectivamente.

Sánchez, gracias a su giro a la izquierda de los últimos meses, también empieza a morderle electorado a Podemos, su aliado de gobierno. El 13% de los ciudadanos que en las últimas elecciones votaron a la formación morada hoy eligen al partido de la rosa. En octubre era del 8%.

El 10% de los que votaron al PSOE en 2019 elige hoy al PP o a Vox

Moncloa entiende que si a mitad de año este volantazo a la izquierda evitó el naufragio de la legislatura y le permitió al Gobierno recuperar la iniciativa política, en diciembre, el "regreso al centro" es la llave para que Sánchez pueda mantenerse en el poder y revalidar su liderazgo en las urnas. Esa es la lectura que hace el PSOE tras la aprobación de los Presupuestos Generales.

En octubre, cuatro de cada diez votantes que se habían elegido la papeleta socialista en 2019 cambiaban su preferencia electoral. En diciembre el porcentaje se redujo. El PSOE retiene casi el 69% de sus apoyos

La nueva coyuntura exige, a juicio de quienes asesoran al líder socialista, una "nueva estrategia" y "un nuevo perfil". Moderación, distancia con UP y socialdemocracia de manual. "Una vuelta al centro", como lo definen en el Ejecutivo.

 El PSOE entiende que la coalición no se va a romper. Cuánto mucho se descocerá, como ya ha pasado tantas veces de enero de 2020 a esta parte. Ese voto, el de izquierda, ya está asegurado para revalidar un Ejecutivo de "alianzas progresista" en 2023, entiende Moncloa.

Feijóo busca extinguir a Vox y forzar un adelanto electoral en Valencia antes de mayo

Falta recuperar a los votantes menos ideologizados, los que, dependiendo las coyunturas y los estados de ánimo, se mueven dentro del bipartidismo. Si Sánchez toma distancia de Podemos, aparca su "giro a la izquierda" y empuja al PP a la radicalización -y mantiene la economía a flote en el convulsionado contexto europeo-, puede pescar muchos votos de "centro", razonan en Ferraz.