Ayuso reivindica la "raíz cristiana" de España y hace otro guiño al integrismo católico
La presidenta de la Comunidad de Madrid suele apelar a la religión y las tradiciones. Y ahora que se propone conseguir una mayoría absoluta en las elecciones de mayo a costa de Vox, Isabel Díaz Ayuso está lanzando cada vez más guiños a los sectores católicos. Durante la inauguración del Belén en la Puerta del Sol, la baronesa del PP llamó a "recuperar la cultura religiosa" porque es "inseparable de la cultura con mayúsculas de la que venimos y que necesitamos para saber adónde ir".
Para Ayuso, "el Evangelio, la buena nueva, es parte de la herencia de todos". "No es justo arrancar a los hombres de su historia ni de su tradición ni de su dimensión trascendente que buscará cada uno en libertad y en paz", lanzó. Lejos de cualquier idea de una sociedad plural, la presidenta madrileña insistió en que "la historia de España no se explica sin su raíz cristina".
También defendió a la familia, a la que calificó de "sagrada", y que toda vida humana es "algo precioso, insustituible, y nadie está de más y ninguna vida vale menos ni merece menos ser vivida", en una alusión bastante directa al aborto. Pero el "pacto por la Navidad" no es algo novedoso: la retórica de Ayuso siempre recurre al cristianismo y a figuras como Isabel la Católica, de quien se ha declarado admiradora.
La Cruz del Valle de los Caídos, ahora Cuelgamuros, en la mira de la ley de Patrimonio de Madrid.
En septiembre del año pasado, la líder del PP de Madrid arremetió contra el papa Francisco por haber cuestionado el impacto de la colonización en América. En ese entonces dijo sentirse sorprendida de que un "católico que habla español hable así de un legado como el nuestro", reconociendo el rol de la evangelización en esa etapa histórica. La presidenta prefiere a Juan Pablo II, a quien citó este martes: "Se preguntaba: ‘¿Se puede apartar a Cristo de la Historia de cada nación?'".
Feijóo busca extinguir a Vox y forzar un adelanto electoral en Valencia antes de mayo
Con todo, Ayuso ha dado un paso más en complacer al integrismo católico. El PP ha impulsado en la Asamblea la ley de Patrimonio Cultural de la CAM, que contempla la protección de sitios religiosos, incluyendo calvarios, edificios y cruces, lo que supone el resguardo de la Cruz del Valle de los Caídos, de más de 150 metros de altura y una obsesión de grupos ultraderechistas afines al franquismo. Rocío Monasterio, portavoz de Vox en la Asamblea, aplaudió la iniciativa.
La retórica religiosa no es impostada en Ayuso. En estas fechas florece el discurso cristiano de la presidenta, que comparte con los sectores integristas las preocupaciones por la natalidad y los hechos históricos que tocan a España, aunque sin alinearse orgánicamente con sus instituciones. Pero Alberto Núñez Feijóo le ha encomendado una mayoría en Madrid y borrar a Vox del escenario político regional. Ayuso no se siente incómoda mimetizándose con algunos tópicos de la extrema derecha.