Massa negocia más fondos con los gobernadores para que voten el Presupuesto
El presupuesto de 2023 se dictaminará el jueves en Diputados con modificaciones negociadas entre los legisladores, el ministro de Economía Sergio Massa, los gobernadores de todas las fuerzas políticas y sectores del oficialismo vinculados al kirchnerismo y a los movimientos sociales. También habrá aportes de los diputados de Juntos por el Cambio que podrían ser tenidos en cuenta.
Así se resolvió en una nueva reunión de la comisión de Presupuesto que preside Carlos Heller, después de agostarse los discursos políticos tras dos semanas de debates que superaron las 50 horas y tuvieron el mayor desfile de funcionarios que se recuerde.
"Hace falta más tiempo de trabajo entre nosotros y menos de discurso", propuso el jefe del oficialismo Germán Martínez, cansado de duelos entre los economistas Martín Tetaz (Evolución radical), Susana Landriscini e Itaí Hagman (Frente de Todos).
El radical Víctor Romero pidió suspender la reunión pautada para el miércoles y trasladarla al jueves para dictaminar, tiempo suficiente para definir las modificaciones que permitan aprobar el proyecto con la mayor cantidad de votos posibles.
El kirchnerismo y los movimientos sociales presionan para aumentar el gasto social
Los principales bloques de Juntos por el Cambio detallaron sus pretensiones en la reunión del pasado jueves y este miércoles acercarán borradores con posibles redacciones. La única bancada que por ahora no hizo propuestas fue la Coalición Cívica y Elisa Carrió sugirió en una entrevista televisiva que pedirá que sus diputados voten en contra.
La UCR tuvo una reunión el lunes con asesores economistas y ratificaron su idea de aprobar la ley en general y modificar los artículos que consideren. La comparten sus socios de Evolución radical y de una buena parte del PRO, que considera el primer presupuesto de ajuste de la historia kirchnerista. Todavía no aparecieron las órdenes cruzadas de sus líderes, habituales antes de cada sesión.
Massa inició las negociaciones con los gobernadores. Estuvo el lunes con el santafesino Omar Perotti, quien pidió un refuerzo para su provincia a través de sus diputados. El martes se reunió en Santiago del Estero con los gobernadores del norte grande y recibió una lista de reclamos, algunos compartidos con la oposición.
Es el caso de los subsidios al transporte de las provincias, que el presupuesto establece en 66 mil millones y los gobernadores pedirán elevar a 100 mil. Los norteños lo quieren llevar a 113 mil, pero en el Frente de Todos no creen que Massa esté dispuesto a ceder.
"Será un número similar a 66", aseguran. Se acercaría a los 85 mil. Este miércoles los gobernadores ejercerán presión durante una reunión de la Comisión de Transporte, presidida por el radical jujeño Jorge Rizzotti, a la que asistirán los ministros de las provincias.
El jefe del oficialismo Germán Martínez negocia con el radical Ricardo Buryaile.
Los mandatarios norteños también negocian un aumento a los kw de energía subsidiadas, por ser una zona cálida, avales para créditos internacionales, obras públicas y otros aportes que decrecen.
Y no están conformes con el artículo 90, que permite cobrar deudas a Cammesa de distribuidoras energéticas con fondos de coparticipación federal. También piden borrarlo los partidos provinciales (claves para una mayoría) y los radicales.
Martínez ya lo habló con Massa, quien se mantiene duro en su posición y en tal caso podría negociar una redacción más amena a los mandatarios, que apunte a un sistema de amortización. De lo contrario, en la próxima auditoría con el FMI le costará justificar el recorte de fondos a Cammesa que está previsto.
Uno de los partidos provinciales es el de Córdoba, que tiene 3 diputados y reclama además aumentar los fondos para las 13 cajas previsionales no transferidas a la Nación e incorporar un listado de obras públicas a incorporar.
Massa negocia además con los gobernadores a través de los senadores nacionales, que participaron de los debates de Diputados a través del presidente de la Comisión de Presupuesto, el riojano Ricardo Guerra, quien esperaba una cita para Economía este miércoles.
El ministro también le prometió repasar las obras de Río Negro al senador y ex gobernador Alberto Weretilneck, jefe de la dupla de diputados de su partido, Agustín Domingo y Luis Di Giácomo.
El diputado de Córdoba Federal Ignacio García Aresca y el radical Víctor Romero.
El plan no varía: aprobar el presupuesto el 26 de octubre y sancionarlo lo más rápido posible en el Senado antes del inicio del mundial de fútbol.
Las demandas del kirchnerismo y los movimientos sociales podrían ser saldadas con un refuerzo a la partida de las becas progresar y la ayuda alimentaria, que tienen un fuerte recorte.
El Frente Patria Grande de Juan Grabois, que tiene 3 diputados, celebró además el bono de 45 mil pesos en dos cuotas que anunció Massa, un símil al salario universal que vienen pidiendo. Dudaban que el ministro cumpliría. Ahora piden además un refuerzo para el plan de regularización de tierras, el renabap. Un proyecto aprobado en Diputados lo extiende por dos años y suspende por 10 los desalojos.
Con la oposición la negociación será en Diputados en reuniones privadas entre Martínez, Carlos Heller y los referentes de cada bloque. No hay consenso aún sobre el artículo que prorroga las retenciones y JxC quiere agregarle un compromiso de no subirlas, propuesto por el secretario de agricultura Juan Bahillo.
A los oficialistas no les entusiasma esa corrección, pero escucharán ofertas de la oposición. El radical Ricardo Buryaile tiene redacciones preparadas para proponer.
El diputado de Evolución radical Emiliano Yacobitti y el jefe de la Coalición Cívica Emiliano Ferraro.
No hay chance que prospere la propuesta del PRO para congelar la planta de personal o cancelar con bonos las deudas contraídas para 2024. Las transferencias a las universidades, un clásico de cada negociación presupuestaria, tienen un recorte y hay pedidos de Córdoba, Formosa (el rector es opositor a Gildo Insfrán) y Mendoza.
El diputado de Evolución Radical Emiliano Yacobitti, que es vicerrector de la UBA, negoció con Massa las partida a esa casa de estudios.
Sólo reclama una deducción del impuesto a las ganancias por gastos educativos, para aliviar la carga de las familias con hijos en edad de estudio. La diputada de izquierda Romina del Plá reclamó además por la reducción de la asignación del Fonid, el incentivo docente que paga la Nación a las provincias.
Cuando presentó el presupuesto, Massa sugirió una cláusula gatillo para revisar si la inflación del 60% se cumple y enviar ampliaciones del gasto si se elevara y se recaudara más. Tetaz pidió en la reunión de este martes que el destino de esos excedentes se defina por ley y no por decreto. Nadie le respondió.
Otro tema complejo son las prórrogas del blanqueo a la construcción. La Coalición Cívica no lo vota y el PRO pide que sea en una ley aparte, como reiteró este martes la rosarina Germana Figueroa Casas. El oficialismo sólo aceptaría modificar la redacción. Escuchará propuestas.