Migración

Sin grieta: sorprende a Adams un contingente de migrantes que envía el alcalde latino de El Paso

El demócrata que gobierna la ciudad de origen de Beto O'Rourke se plegó a la moda que impuso el gobernador republicano Greg Abbott. Cómo llegan a Nueva York.

El actual quebradero de cabeza del alcalde de Nueva York es la gestión de la llegada de inmigrantes a la Gran Manzana. Pero mientras Adams ha enfocado su fuego en el gobernador republicano Greg Abbott por enviar miles de inmigrantes a Nueva York, más de 50 autobuses han traído a más de 2,000 personas por cortesía del alcalde demócrata de El Paso, una ciudad que es 82% latina, abrumadoramente demócrata y hogar del candidato a gobernador de Texas Beto O'Rourke. Desde julio, el alcalde de El Paso, Oscar Leeser, ha ofrecido a los recién llegados del otro lado de la frontera un viaje en autobús gratuito a la ciudad de Nueva York o Chicago.

Leeser es un alcalde latino que nació en Chihuahua, México, y vivió allí hasta las 9 años. Ya gobernó El Paso entre 2013 y 2017. A las personas que carecen de recursos se les ofrece el viaje en autobús de larga distancia, siempre que firmen un documento que diga, en inglés, que la Ciudad de El Paso no es responsable por lesiones personales, daños a la propiedad o cualquier otra desgracia en el autobús.

La mayoría de los venezolanos que cruzaron la frontera preferían ir a Miami según comentarios de recién llegados. Miami tiene la población venezolana más grande de los Estados Unidos, pero la idea de ir a Nueva York les pareció buena al pensar que podrían tener más opciones de encontrar trabajo. Precisamente este es el principal problema, una vez que llegan los inmigrantes a Nueva York. Si bien no es fácil la situación de conseguir cobijo, muchos tienen que batallar para asegurar camas en los albergues. La ciudad intenta poner a su disposición opciones, como los recientes hoteles habilitados para inmigrantes.

Acorralado por Abbott y por las críticas, Adams decide mudar un campamento de inmigrantes a una isla de Nueva York

Adams declaró el estado de emergencia el viernes y ordenó a los funcionarios de la ciudad que crearan "centros temporales de ayuda humanitaria" para ayudar a los solicitantes de asilo con alimentos, atención médica y asistencia para encontrar refugio. Según la orden ejecutiva de emergencia de Adams, la ciudad ya ha abierto 42 refugios para los solicitantes de asilo, pero esos refugios actualmente tienen la población más alta de su historia: unas 61,000 personas, según la orden.

Hasta el momento la narrativa mediática ilustraba una batalla entre demócratas y republicanos, pero el alcalde de El Paso envió 7,330 migrantes a la ciudad de Nueva York desde agosto.

El alcalde anunció también planes para gastar $1 mil millones en respuesta e instó a los gobiernos federal y estatal a contribuir para financiar viviendas y otros servicios para los migrantes.

LPO pudo hablar con Adams en su participación en el desfile de la comunidad italoamericana en el día de Colón, festividad que pasó a llamarse Día del Indígena.

"Esta situación es tan compleja y la definen los comentarios. Yo quiero tomarme un tiempo y decirle a los neoyorquinos que ven más niños en las clases y más personas en los albergues, como construimos cobijos. Quiero que los neoyorquinos se informen a través mío, no por comentarios de otros", le dijo Adams a LPO.

El alcalde Adams, durante el desfile del Día del Ïndigena.

Las propias organizaciones humanitarias que trabajan para ayudar a los inmigrantes han criticado la batalla política de ambos lados, demócrata y republicano, usando la crisis migratoria de forma electoral. Pero el hecho que un alcalde demócrata en Texas haya transportado en autobús a más del doble de inmigrantes a la ciudad de Nueva York que el gobernador republicano del estado añade más polémica al conflicto.

El programa de transporte en autobús de El Paso a Nueva York y Chicago comenzó a principios de agosto y, hasta esta semana, a la mayoría de los que rechazaron los viajes se les dijo que la ciudad no financiaría los boletos en otros lugares. Sin otro recurso, decenas de migrantes se reunieron en el campamento improvisado en el centro de la ciudad, varados y arruinados. Durmieron entre montones de ropa donada, hasta que la policía los desalojó el 18 de septiembre. Después de eso, deambularon por las calles cercanas.

Adams envió funcionarios a Texas en medio de otra oleada de inmigrantes que llegan a Nueva York

Hasta el momento la narrativa mediática ilustraba una batalla entre demócratas y republicanos, pero el programa de reubicación del alcalde de El Paso supone un nuevo ángulo con los 7,330 migrantes que se han mandado a la ciudad de Nueva York desde la ciudad fronteriza desde agosto.