Opinión

La Córdoba conjetural

El escenario político de Córdoba presenta una arquitectura compleja donde confluyen diversos factores, perspectivas, ángulos y dimensiones signados por una lógica de variables conjeturales. La incertidumbre, la detentación de poder, los riesgos y la especulación protagonizan la conversación política de cara a 2023.

 Zumban las balas.

Existe un dilema paradojal en la acción de combate. En el paso al acto. La táctica militar contradice circunstancialmente los fines de la estrategia que la dicta, esta acción, además de estar reñida a la circunstancia del pleito, responde directamente al impulso intrínseco de la lógica táctica. En esa lógica, es curiosamente, mas importante el debilitamiento del adversario que el fortalecimiento propio. Una Paradoja. En el campo, siempre, se piensa antes en el adversario.

El peronismo cordobés conoce ese manual liceísta de combate militar.

La conversación política y el cuadro de la escena en córdoba nos recuerda a las pinturas surrealistas de Escher, sus dimensiones, espacios y perspectivas traicionan la mirada no contemplativa. Para intentar comprender la escena, es necesario, apelar a la información, pero, además, a la conjetura que se desprende de ella. Doble clic ahí.

La gestión como principal elemento de capital político, es el fuerte del oficialismo, la administración del gobernador cuenta con un amplio respaldo y aprobación, como así también la del intendente de la ciudad Martin Llaryora, que después de mucho tiempo para un ejecutivo en la ciudad supera los 60 puntos de imagen positiva.

Mientras tanto, hacemos piensa más en el tablero de la coalición Juntos que en la construcción del armado propio. Es que el frente opositor tiene una amplia identificación entre el electorado cordobés, sentado sobre su identidad antikichnerista. Aunque la lógica del elector de la provincia es muy disímil entre parlamentarias y ejecutivas-en referencia a las legislativas del año pasado-, no deja de representar una amenaza la posibilidad de que Juntos comulgue en unidad.

Hagamos un recorrido por el laberintico mapa conjetural que hoy protagoniza el tablero político de la provincia.

Conjetura. Rodrigo De Loredo decide disputar la intendencia de la ciudad de Córdoba. En ese marco deberíamos pensar primero como jugaría en la provincia el eslabón más fuerte de la UCR, el territorio, las intendencias, cuyos líderes vienen reclamando el tratamiento del proyecto para la ReRe que impulso el oficialismo y no acompaño el partido. En este escenario los jefes deberían confiar en la palabra de Luis Juez a quien le son reticentes y depositar en su compromiso-el de Juez- el futuro de sus gestiones, ser la retaguardia de una posible derrota que implique tenciones futuras con el oficialismo y la caída de pactos precedentes. En este escenario además, Luis Juez no contaría con el apoyo del líder Mauricio Macri, que, según revelan en off fuentes muy cercanas, no aprueba la candidatura del ex intendente. Tenemos que pensar también que la resignación de una aspiración a la gobernación del radicalismo divide las aguas en los comités y el propio presidente del partido a nivel nacional se expreso reprobando esa renuncia.

Esta escena seria claramente la más inconveniente para el oficialismo. Antes de que sucediese cabe recordar que deberían definirse las candidaturas en una interna que, confiesa el hombre más importante del radicalismo en lo que a intendencias refiere, Daniel Salibi, costaría más de cien millones de pesos.

Otra, muy vigente en las filas de hacemos, supone un radicalismo que decide disputar la gobernación y se parte el frente Juntos en la provincia, en este marco, las elecciones serian prácticamente un trámite para el actual intendente Llaryora, pero el partido centenario recuperaría protagonismo y consagraría a De Loredo como figura central en la conducción de la casa.

Dentro de Juntos, sospechan un golpe artero, uno que subvertiría el tablero en clave mundial, creen que existe un plan del peronismo para aprovechar el fulgor popular y la distracción de la opinión pública durante el mundial para modificar la fecha de las elecciones, adelantando el sufragio para el mes de marzo, en vez de junio, de este modo se rompería el plan de plazos del ex presidente de ARSAT De Loredo y desordenaría la concertación de Juntos.

El oficialismo quita el apoyo al proyecto Re Re de los intendentes, apoya la baja de las PASO nacionales, juega desordenado, desordena sus piezas, la táctica obliga, montado sobre la conjetura, para empujarla a realidad.

Exquisito Borges ya dijo que "dios mueve al jugador, y éste, la pieza. ¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza?" "como el otro, este juego es infinito".

Conjeturas.