Senado

Se demoró la ley de consulta popular de Parrilli porque un senador peronista no llegó de Brasil

El salteño Leavy se demoró en los festejos del bicentenario de Brasil y no se pudo firmar dictamen.

El dictamen de la reforma de la ley de consulta popular que impulsa el senador Oscar Parrilli se demoró porque el oficialista Sergio Levy no pudo llegar desde Brasil, donde viajó para participar de la celebración de bicentenario. 

No estuvo sólo: lo acompañó su compañero de bloque Antonio Rodas y la radical Silvia Giacoppo. Los tres integran le parlamento de América Latina (Parlatino). 

Pero la dupla del Frente de Todos tuvo que volver cuando se enteró que este jueves habrá sesión y consiguieron un vuelo para aterrizar este miércoles por la noche.

Sin Leavy, al Frente de Todos le faltaba un voto en la comisión de Asuntos Constitucionales para dictaminar el proyecto que promueve Parrilli para flexibilizar los requisitos necesarios para llamar a una consulta popular, ya sea vinculante o no.

El kirchnerismo empezó a tratar la ley de consulta popular y podría pedirla para negociar con el FMI

El principal es que se podría realizar en forma simultánea a otra elección, un impedimento que hace muy costosa el mecanismo y con dificultades logísticas. "Se puso así para que nunca se haga ninguna", bromeó Parrilli al abrir la comisión, que sólo tuvo la presencia de un opositor: el radical fueguino Pablo Blanco. Le valió un reconocimiento de la kirchnerista Anabel Fernández Sagasti, molesta porque la oposición mantiene su postura de no ir a las comisiones.

Antes del inicio recorrió la sala el vice de la comisión José Torello, del PRO, pero no se quedó. Tampoco llegó el rionegrino Alberto Weretilneck, cuyo voto es clave para alcanzar una mayoría. Aún no había arribado a Buenos Aires. Sin número posible para firmar, tampoco fue el jefe del oficialismo José Mayans. 

Dos senadores oficialistas están en Brasil para celebrar su bicentenario y volverán para sesionar el jueves. Uno es el salteño Leavy, que faltó a la comisión de asuntos constitucionales y no fue posible dictaminar la ley para flexibilizar la consulta popular que propone Parrilli.  

Las otras modificaciones que propone Parrilli son que las consultas populares puedan convocarse con la mitad más uno de los miembros presentes del Congreso (la ley actual mayoría especial). Mantiene las excepciones constitucionales ( reforma de la carta magna, tratados internacionales, tributos y temas penales), pero las habilita para las consultas no vinculantes.

Parrilli imagina consultas para los temas que no prosperaron en el Congreso, como la reforma del Consejo de la magistratura, la ampliación de la Corte y hasta un futuro acuerdo con el FMI. 

Buscará que se dictamine en la próxima reunión de comisión de Asuntos Constitucionales. Intentó hasta último momento hacerlo este miércoles y hasta llamó a votar. Rápido de reflejos, el presidente Guillermo Snopek dijo que sería una reunión informativa pospuso las firmas para dentro de 15 días. 

En la reunión expuso Hugo Yasky, diputado y líder de la CTA, que en 2001 ensayó una consulta popular a través del  Frente Nacional Contra la Pobreza (Frenapo), en la que se logró la participación de 3 mil personas.

El constitucionalista Eduardo Barcesat respaldó la ley y sugirió incorporar los argumentos "a los fundamentos de la ley, porque posibilitan una mejor defensa cuando se trata, como es en ese este caso, de mejorar los mecanismos de la democracia participativa".