Proyecciones

Pese a la posición restrictiva de Banxico, el mercado sigue anticipando mayor inflación

La última encuesta del banco central revela que siguen los incrementos en las proyecciones para 2022 y para 2023. Ajustes también para la economía.

Una preocupación real para Banco de México es que a pesar de los duros aumentos a la tasa de interés no logran anclar las expectativas del mercado sobre la inflación en el corto y mediano plazo, como revela su más reciente encuesta de agosto, en donde los participantes volvieron a hacer ajustes al alza.

De acuerdo con el documento publicado este jueves, los expertos encuestados subieron su proyección para la inflación al cierre de este año a 8.15%, desde el 7.83% estimado en julio. El dato se alinea con la propia expectativa del banco central, que el pasado 11 de julio también subió su expectativa a 8.1%.

En esta encuesta también se observa una mejora en la proyección para el Producto Interno Bruto (PIB) del país  este año a 1.93% desde el 1.78% que contemplaban anteriormente, un movimiento al alza que han hecho otras instituciones y organismos económicos luego del dinamismo del primer semestre del año, principalmente por los primeros tres meses.

En el Banco de México ya no se habla de recesión pero estiman un crecimiento de sólo 1.6% para 2023

Sin embargo, las preocupaciones son evidentes para 2023, en medio de temores generalizados de una desaceleración económica mundial debido a las afectaciones por la guerra y la pandemia que continúa generando estragos. En ese escenario, el consenso anticipa meno crecimiento económico en el país y una inflación mayor a la estimada hace unos meses.

Si las proyecciones de la encuesta de Banxico se materializaran, el PIB al cierre del próximo año se ubicará en 1.31% -que contrasta con el 1.51% que pronosticaron en julio- y la inflación estará todavía alejada del objetivo de Banxico, pues se ubicaría en 4.62%, un ajuste al alza desde el 4.58% que se esperaba en julio.

El anclaje de expectativas es una de las preocupaciones que ha ganado terreno en las discusiones al interior de la junta de Banxico. Para algunos de sus miembros es ineludible considerar este escenario como un reto para la política monetaria, en tanto que existe un debate de hasta qué punto pueden mantener la postura restrictiva.

En los últimos meses han mantenido incrementos de 75 puntos base y después de conocerse las minutas de la discusión del pasado agosto, el consenso anticipa que volverán a repetir la fórmula este septiembre, sobre todo ante las señales de la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés).

En el banco central mexicano hay voces que afirman que se debe seguir con atención los choques a la inflación y la naturaleza de estos para determinar la ruta a seguir, mientras que otros persisten en mantener una postura contundente, sin faltar la voz del subgobernador Gerardo Esquivel, que apuesta por suavizar el alza de tasas. 

Independientemente de este debate, el mercado muestra que el camino puede ser mucho más retador para que México regrese a una inflación de 3% -o alrededor de este nivel- en el primer trimestre de 2024, como supone Banxico.