Javkin acordó con intendentes de otras ciudades del país suspender el aumento del boleto a la espera de la suba de subsidios nacionales
Los intendentes de varias ciudades del país pusieron en común los inconvenientes que atraviesan por el aumento en los costos para mantener el servicio público de transporte que en el caso de Rosario, el estudio de junio de 2022 arrojó que el valor por pasajero es de $121,73, es decir, un 77% más de la tarifa actual.
Si bien, Rosario, Córdoba y Santa Fe contaban con la potestad de actualizar la tarifa, los intendentes decidieron en conjunto fijar un valor de $85, pero no aplicarlo hasta tener mayores definiciones sobre cómo continuará la redistribución de las partidas nacionales, y cuál será el incremento de las mismas.
Este mecanismo permite resguardar las facultades otorgadas con las que cuenta cada ejecutivo municipal para llevarlas a un valor que garantice el funcionamiento, pero por ahora se dejará sin efecto hasta tener mayores certezas en materia de subsidios, señalaron luego de la reunión.
"Se definió dejar en suspenso la aplicación de la actualización de la tarifa federal, insistir en la redistribucion de los subsidios al transporte del interior y solicitar una audiencia al Ministro de Transporte de la Nación en la que todas las ciudades del interior puedan expresar en conjunto la situación por la que atraviesan", indicaron los alcaldes.
Además, señalaron que en lo que va del año 2022, el combustible lleva un incremento aproximado de 105%, los neumáticos 84,06%, lubricantes 64,4% y los incrementos salariales ascienden un 50% en el mismo período lo que disparó los costos del sistema.
A su vez, el secretario de Transporte, Diego Giuliano, adelantó al diario La Capital que entre febrero y marzo se espera contar con la instalación de las máquinas canceladoras en las unidades de colectivos rosarinos para comenzar a implementar la tarjeta SUBE que permite un mejor control y eficiencia en la transferencia de los subsidios y al mismo tiempo, se trasladan a los usuarios todos los beneficios sociales que el sistema nacional implican.
Lo que ocurrió todos estos años es que el socialismo que gobernó durante tres décadas la ciudad y generó la tarjeta Movi, un sistema municipal para el servicio de colectivos, se resistieron a reemplazarla por la SUBE. Ahora, Javkin viene manteniendo reuniones permanentes con el Ministerio de Transporte para acelerar su aplicación que se concretaría entre febrero y marzo del año próximo.