Adams contra Abbott, la guerra política de demócratas y republicanos por la crisis migratoria en la frontera
El conflicto atraviesa los Estados Unidos con mensajes que van y vienen entre de costa a costa. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, rechazó en las últimas horas una invitación del gobernador de Texas, Greg Abbott, para visitar la frontera entre Estados Unidos y México, a pesar de denunciar que la afluencia de inmigrantes abruma los refugios para personas sin hogar en la Gran Manzana.
En una carta dirigida a Adams y a la alcaldesa de Washington Muriel Bowser, el primer día del mes, el gobernador republicano comentó que Texas ha gastado más de $3 mil millones en los últimos 18 meses "para reducir la devastación que sienten nuestras comunidades, grandes y pequeñas".
De todas maneras, Abbott afirmó que la crisis fue creada por el presidente Joe Biden, debido a que los cruces ilegales han alcanzado niveles récord repetidamente desde que asumió el cargo como mandatario. Adams, por su parte, en el último mes, ha criticado en numerosas ocasiones la "insensibilidad" de los estados fronterizos del sur y ha cuestionado a los gobernadores republicanos, Abbott en Texas, y Doug Ducey en Arizona, por transportar a los migrantes a otros lugares.
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Abbott dijo que, aunque Texas ha estado organizando viajes en autobús para los inmigrantes a la capital de los EE. UU., no los ha estado llevando a la Gran Manzana, como ha afirmado Adams en las últimas semanas.
La llegada de inmigrantes a Nueva York en los últimos años ha tenido lugar mediante aviones fletados por la Casa Blanca de madrugada y, más recientemente, en autobuses. En un informe revelado el pasado viernes, funcionarios de inmigración de la administración Biden en la frontera sur distribuyeron listas defectuosas de refugios para personas sin hogar en la ciudad de Nueva York, dejando a los inmigrantes varados en las calles cuando finalmente son transportados en autobús a la Gran Manzana para buscar asilo.
Abbott desafió a Adams
Adams mostró su preocupación por la saturación de los albergues municipales, y proyectó el caos en el sistema educativo y sanitario para asimilar la llegada de todos estos inmigrantes provenientes de la frontera sur. A lo que respondió el gobernador tejano: "Espero darle la bienvenida a la frontera entre Texas y México para que pueda ver esta crisis por sí mismo. Comuníquese con mi oficina para hacer arreglos de viaje para sus visitas".
Fabien Levy, portavoz de Adams rechazó rotundamente la oferta de visitar la frontera. "En lugar de una sesión de fotos en la frontera, esperamos que el gobernador Abbott concentre su energía y recursos en brindar apoyo y recursos a los solicitantes de asilo en Texas, como hemos estado trabajando arduamente en la ciudad de Nueva York" apuntó Levy en una declaración escrita. "Seguimos trabajando con socios federales para recibir recursos financieros adicionales de inmediato, pero nunca le daremos la espalda a los necesitados que están llegando aquí".
Adams gobierna la ciudad más grande de Estados Unidos y ha estado apelando al gobierno federal para obtener fondos adicionales para abordar la afluencia de inmigrantes.
El mismo día que fue invitado a la frontera, Adams anunció una "adquisición de emergencia" de refugio y otros servicios para personas que buscan asilo en la ciudad de Nueva York. Señaló que alrededor de 4000 solicitantes de asilo han ingresado al sistema de albergues de la ciudad desde fines de mayo. Se trata del principal impulsor del aumento de aproximadamente el 10 % en el censo del Departamento de Servicios para Personas sin Hogar de la ciudad.
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Al optar por el término "solicitantes de asilo" para describir la afluencia de inmigrantes, Adams señaló que la ciudad de Nueva York, conocida por sus políticas a favor de las ciudades santuario, no rastrea el estado migratorio de las personas en los formularios de admisión para proteger a las personas de la detención o deportación federal. "La ciudad brinda refugio a todos los que lo necesitan, independientemente de su estatus migratorio", dijo.
Separados por casi 3 mil kilometros de distancia y discursos casi opuestos, el contraste entre Abbott y Adams no podría ser mayor. Mientras en Nueva York se piden fondos y se pone el énfasis en dar servicios para inmigrantes recién llegados, en Texas se apunta a la necesidad de combatir el tráfico humano y los carteles que se benefician de la situación de los inmigrantes vulnerables que buscan acceder a Estados Unidos.
Abbott reconoce la crisis tanto humanitaria como de seguridad en la frontera. En marzo de 2021, el gobernador republicano lanzó la Operación Lone Star en asociación con el Departamento de Seguridad Pública de Texas y la Guardia Nacional de Texas. Desde entonces, las agencias han desplegado miles de soldados y guardias "para combatir el tráfico de personas y drogas como el fentanilo de México a Texas".
Abbott dijo que la operación utiliza activos de seguridad fronteriza aérea, terrestre y táctica "en un intento de negar a los cárteles mexicanos de la droga y otros delincuentes la capacidad de contrabandear drogas y personas directamente a nuestro estado". Hasta la fecha, la misión ha llevado a más de 290.000 detenciones de migrantes y más de 18.000 arrestos penales, con más de 15.000 cargos por delitos graves denunciados.