Biden suspendió la cumbre con Alberto y se cae la negociación para destrabar los 500 millones de dólares del BID

La Casa Blanca le comunicó al Gobierno este viernes la suspensión de la bilateral a la espera de un test negativo del presidente norteamericano.

Joe Biden suspendió la cumbre que iba a tener con Alberto Fernández el martes próximo tras dar positivo de coronavirus y se cae la negociación para destrabar los 500 millones de dólares del BID.

La Casa Blanca le comunicó al Gobierno este viernes la suspensión de la bilateral a la espera de un test negativo del presidente norteamericano, que como explicó LPO inició un tratamiento con el antirretrovírico oral Paxlovid.

Biden permanecerá aislado en la Casa Blanca y, según la información oficial, continuará trabajando en un contexto en que el gobierno analiza declarar la emergencia energética, los demócratas no juntan número en el Congreso para aprobar las leyes que pretenden y la inflación escala al nivel más alto de las últimas décadas.

La suspensión de la bilateral le impide a Alberto negociar con su par estadounidense el crédito de 500 millones de dólares que el BID tiene frenado para la Argentina. Este crédito corresponde a financiamientos de programas educativos, reformas administrativas y algunas obras de infraestructura, que, en general, deberían haber sido liquidados durante el primer semestre del año. Para septiembre se suman 300 millones de dólares más.

Dada la urgencia que tiene el gobierno por nutrir las arcas del Banco Central, en la agenda que Alberto tenía previsto tratar con Biden el próximo 26 de julio, tiene contemplado plantear un pedido de ayuda ante Carone para que destrabe el envío de estos fondos. El Central necesita este ingreso de divisas para alcanzar el nivel de reservas comprometido con el Fondo.

Y la mediación del demócrata Biden es clave porque el BID está en manos de Maurice Claver Carone, que llegó al cargo con el respaldo de Donald Trump. Carone es enemigo del gobierno argentino, que impulsó a Gustavo Béliz en la elección con la que el norteamericano rompió la histórica tradición del banco de entregar su presidencia a un representante de Latinoamérica.

Alberto de hecho hizo un pedido formal de remoción amparado en la nacionalidad de Carone como argumento técnico. La respuesta del BID fue que la llegada del funcionario fue fruto de la votación de los miembros y que no hay en ningún lugar del estatuto de la entidad un impedimento legal para que un ciudadano de ese país sea elegido.