Recesión

Se desploma la confianza con la economía de Biden y analistas ven inexorable un cimbronazo en el segundo semestre

Llueven indicadores sobre el sentimiento de la población con la economía demócrata que muestran niveles mínimos de un año y medio. Analistas consultados por LPO anticipan cómo sigue. ¿Golpe electoral asegurado?

 Todos los caminos llevan hacia el mismo lugar. El último dato de la confianza del consumidor publicado este martes, que mostró un desplome a su menor nivel en 16 meses, fue otra señal de lo que parece ser algo inexorable: una recesión económica a la vuelta de la esquina. A eso se le suma que la perspectiva de que habrá más inflación también se elevó y el mercado inmobiliario, un termómetro infalible de cómo está el nivel de actividad, también está en caída. "Se reían de Elon Musk. Pero viene defraudando la economía últimamente y desde junio está empeorando", señaló a LPO Gustavo Neffa, director de Research For Traders.

La confianza del consumidor, un indicador clave para anticipar el ciclo económico, sucumbió 4,5% en junio debido a las presiones sobre los bolsillos que genera una alta inflación en la población. Esto hace que, según la medición del Conference Board, sea muy probable que haya una recesión en la segunda mitad de este año.

"La confianza del consumidor está fuertemente incidida por la inflación, y ambas contrastan fuertemente con los datos de empleo que siguen siendo muy robustos. Incluso si se miran las ganancias de las compañías todavía están bien, si bien van a empezar a defraudar también", agregó Neffa.

"Al momento de las elecciones el país ya estará en recesión, vamos a una economía similar a la de los ochenta"

Alberto Bernal, estratega jefe de XP Investments afirmó a LPO que la caída de la confianza al consumidor es un dato más que demuestra que la gente se está volviendo más cauta, y que la inflación está claramente pegando. "Yo me mantengo en la idea de que la inflación ya está cediendo, los precios de los productos de los bienes están bajando porque los inventarios están altos y cae el consumo y eso empezará a filtrarse en la expectativa de inflación", sostuvo. Sin embargo, admite que el indicador del Conference Board implica "serios riesgos a la baja para el crecimiento".  

La visión de la población sobre la economía ha seguido oscureciéndose, como lo indica el Índice de Confianza Económica (ECI) de Gallup. El índice, que es un resumen de las calificaciones de los encuestados sobre las condiciones económicas actuales y las perspectivas de la economía, se ha hundido 13 puntos en el último mes

A pesar de la perspectiva sombría, los consumidores mostraron aún pocas señales de reducir el gasto, y aumentaron los planes de compra de vehículos y otros artículos caros como refrigeradores y lavadoras, según la medición. Esto, que podría ser una buena noticia para la administración Biden con el argumento de que el consumo aún está latente a pesar de las perspectivas negativas, está opacado con el hecho de que menos consumidores en comparación con abril tenían la intención de gastos más "sofisticados" como irse de vacaciones dentro del país o al extranjero por el precio récord de la gasolina y las costosas tarifas aéreas.

Gustavo Neffa, director de Research For Traders

En general. lo que mostró el Conference Board corrobora otros indicadores. La última investigación de Gallup mostró que dos tercios de los estadounidenses dicen que los aumentos recientes en el precio de la gasolina les están causando dificultades financieras, frente al 52% en abril. Aunque más estadounidenses dicen que están experimentando dificultades "moderadas" en lugar de "graves", el porcentaje que describe las dificultades como graves ha aumentado del 14% al 22%. 

A medida que los precios de la gasolina se han vuelto más onerosos, la visión de la población sobre la economía ha seguido oscureciéndose, como lo indica el Índice de Confianza Económica (ECI) de Gallup. El índice, que es un resumen de las calificaciones de los encuestados sobre las condiciones económicas actuales y las perspectivas de la economía, se ha hundido 13 puntos en el último mes a "-58". 

El índice tiene un rango teórico de +100 si todos los encuestados describen la economía en términos positivos y piensan que está mejorando a -100 si todos la describen en términos negativos y piensan que está empeorando."El puntaje ECI de -58 de hoy representa un sesgo sustancialmente negativo en la opinión pública sobre la economía y es el más bajo medido desde una lectura de -64 en febrero de 2009. En ese momento, el país todavía estaba envuelto en la recesión de 2007-2009 y la confianza estaba comenzando a recuperarse después de tocar el mínimo histórico de -72 en octubre de 2008", dice Gallup.

Santiago Palma Cané, socio de la firma Fimades, advirtió a este medio que todos los indicadores vienen con un deterioro importante. El panorama es que los mercados financieros, que este martes cayeron hasta 3% precisamente por el pésimo dato del consumidor, ya están descontando un muy mal escenario futuro de crecimiento económico que impactará en las ganancias empresarias.

"Llevamos meses sin buenas noticias, habrá que ver en este segundo semestre el efecto de la suba de tasas sobre la inflación que creo que no se va a moderar en el corto plazo. Quizás en el último trimestre. Eso determinará mucho si modera la inflación y el impacto en la actividad económica", aseguró.

Javier Timerman, socio de Adcap Grupo Financiero

Claro que nadie tiene la bola de cristal para adivinar qué tan severa será el parate económico. Jorge Piedrahita, CEO de Gear Partners, le había dicho a LPO que los soft landings (aterrizajes suaves de la economía, como se dice en la jerga financiera) son a veces producto de la casualidad, difíciles de hacer. "Jerome Powell subió 75 puntos las tasas y ya se está hablando de que serán 75 puntos más en julio. Hará lo que sea para bajar la inflación al objetivo de 2% anual. Y para lograr eso va a tener que poner a la economía en una recesión. Incluso Powell reconoce que quizás no se puede evitar una recesión", admitió. 

Los indicadores vienen con un deterioro importante. El panorama es que los mercados financieros ya están descontando un muy mal escenario futuro de crecimiento económico que impactará en las ganancias empresarias. Llevamos meses sin buenas noticias, habrá que ver en este segundo semestre el efecto de la suba de tasas

En el mundo de los economistas profesionales y portfolio managers hay un parámetro para ver si ya estamos o no en una recesión. Y eso es ver qué dicen los precios de los activos, o sea Wall Street. Javier Timerman, socio fundador de Adcap Grupo Financiero, dice que el mercado le tiene miedo a una recesión fuerte. Pero afirma que es muy difícil predecir si los bear (los pesimistas) y los bull markets (los optimistas) empiezan y terminan cuando empieza y termina una recesión.

Timerman apunta que generalmente empiezan antes de la recesión y terminan bastante antes de que termine esa recesión. Es por eso que, entonces, no cree que esté por venir una gran recesión en Estados Unidos, principalmente porque la Fed está dando señales y las empresas están ganando dinero. "No veo ni una recesión fuerte ni un hard landing fuerte", advierte.