Diputados

Morales se diferencia de Cornejo y pide incorporar Sube para tener subsidios

Es un proyecto de un diputado de su espacio que empezará a tratarse el martes. El mendocino y Schiaretti quieren que no se controle los pasajeros en los micros.

La Cámara de Diputados comenzará a debatir la federalización de los subsidios a los colectivos locales con un proyecto promovido por el gobernador de Jujuy, el presidente de la UCR Gerardo Morales, que condiciona los fondos a la instalación del sistema Sube, tal como reclama el Ministerio de Transporte para así poder testear la demanda. 

La propuesta colisiona con la presentada en el Senado por el radical Alfredo Cornejo y la cordobesa Alejandra Vigo, esposa de Schiaretti, que no obliga a tener Sube en los micros para acceder a subsidios. 

Morales impulsa la suya a través del diputado Jorge Rizzotti, jujeño y presidente de la Comisión de Transporte, donde el martes a las 14 horas empezarán a tratarse los proyectos que abordan el tema.   

La diferencia entre el titular de la UCR y su antecesor no es menor porque la tarjeta Sube, que hace 11 años está habilitada en los colectivos de la Ciudad y en Gran Buenos Aires, le permite al Gobierno saber si algunos viajan vacíos y piden plata. 

El fallecido ex ministro de Transporte Mario Meoni y su sucesor Alexis Guerrera intentaron sin éxito que todas las provincias lo incorporaran para ampliar las partidas, pero no lo lograron. 

Los gobernadores advierten que habrá un paro nacional de micros si Alberto no federaliza los subsidios

 Además, en Transporte recuerdan que los gobernadores se comprometieron a no recibir un peso de la Nación para sus micros cuando firmaron el pacto fiscal de 2017. "Sin datos no se puede hacer mucho. Sacar un boleto único para todo el país sería unitario y los criterios pueden ser variadísimos. Por eso lo mejor es que lo defina el Congreso", sostienen.  

Los gobernadores están apurados en establecer un aumento en los subsidios, porque calculan que con la paritaria de los choferes en julio no podrán cubrir los fondos que les piden las empresas locales. Algunos amenazan con un paro nacional y responsabilizar al presidente. 

El Gobierno no quiere repartir subsidios a provincias que no tengan Sube, porque no controlar la demanda de los colectivos. Pero si hay una ley no se opondría. El proyecto de un diputado de Morales la pide incorporar, pero otro de Vigo y Cornejo la excluye. 

La única decisión tomada por Guerrera para contenerlos es un aumento del 40% en las tarifas en el Amba y acelerar el traspaso de las 32 líneas de colectivos que sólo transitan por la Ciudad de Buenos Aires y financia la Nación. No hay otra provincia con ese privilegio. 

Pero una ley para fijar criterios de reparto de subsidios no es sencilla, porque si no son claros los gobernadores se pelearán cada peso a fin de mes. Por caso, en los cruces de datos surgieron cuestiones a considerar, como provincias que tienen tarifas más alta pero ofrecen boleta escolar gratuito, como Córdoba. 

Alfredo Cornejo y Alejandra Vigo. 

El proyecto de Rizzoti solicita repartir los subsidios al Sistema Integrado de Transporte Terrestre (Sistrans) en base a tres pautas: unidades vigentes habilitadas y declaradas a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, cantidad de empleados activos y de kilómetros promedio mensuales recorridos por semestre. 

No incorpora la demanda de boletos, aunque sí establece que para "lograr una coordinación tarifaria federal eficiente y equitativa", los convenios que firme la Nación con las provincias y municipios tendrán "la condición ineludible de adoptar el sistema SUBE". 

De esta manera, el ministro de Transporte podría chequear la demanda en una pantalla. Y los gobernadores también. Otro proyecto presentado por el rionegrino Agustín Domingo también incorpora a la Sube como parámetro para repartir los subsidios. 

Cornejo y Vigo van en sentido opuesto: no exigen la Sube y obligan a la Nación a garantizar los descuentos por beneficios sociales (jubilados, asignaciones por AUH) o boleto integrado a los usuarios que paguen con plásticos provinciales. No explican cómo hacerlo. 

Su proyecto crea un fondo federal de transporte con la recaudación del impuesto al combustible, los aportes de cada presupuesto y también de la Ciudad y la Provincia, por tener servicios nacionales en su territorio. 

Jorge Rizotti, diputado de la UCR. 

Calculan que con este esquema se recaudarían este año 164.235 millones de pesos y proponen distribuirlos con los mismos criterios del proyecto de Rizzotti: cantidad de micros, de empleados y de kilómetros recorridos. 

Pero se aclara que nunca el 30% del fondo podría ir a una sola provincia y en ningún caso será importante cuánta gente suba a los micros. Larreta y Axel Kicillof pierden en todas. 

El debate comenzará en Diputados y no será fácil, porque incorporará otras cuestiones como los subsidios internos de cada provincia. 

En el Frente de Todos dicen que si bien es cierto que Kicillof se favorece por los subsidios al área metropolitana, también lo es que financia los de grandes ciudades bonaerenses, como La Plata, Mar del Plata o Bahía Blanca. "No vamos a aceptar que Schiaretti o (el mendocino) Rodolfo Suárez quieran sustentar todos sus colectivos con el presupuesto nacional", aclaran. 

El dinero en juego es mucho, no para de crecer y va camino a convertirse en otra caja millonaria del presupuesto para pelear todos los años. Según informó en el Senado jefe de gabinete Juan Manzur, en 2020 el fondo compensador al transporte del interior era de 6 mil pesos y saltó a 46 mil millones. 

Esta última cifra, en realidad, fue definida en el dictamen del presupuesto de 2022, luego rechazado por el Congreso. Para que se aplique, Alberto Fernández debería incorporarla al decreto de gastos e ingresos que prometió para abril y no llegó. Es bastante lejos de lo que piden los gobernadores. Y empezarán a negociar entre ellos.