Justicia

Anaya retrocede en los sondeos y teme por su acuerdo de no agresión con Gertz

Desplome en nivel de conocimiento. Las audiencias se encuentran detenidas por determinación del fiscal. El ex candidato nunca lo ha cuestionado.

 Ricardo Anaya comienza a eclipsarse en los sondeos que miden el nivel de conocimiento. Su autoexilio en EU, bajo el argumento de que Andrés Manuel López Obrador quiere encarcelarlo, lo ha alejado de la cotidianidad de la arena política, una falta de presencia que de momento no estaría siendo compensanda por sus videos en YouTube.

En Segob señalan que en los últimos sondeos de conocimiento encargados por la 4T, el queretano aparece con menos de 20 puntos de conocimiento nacional. Algo muy similar sucedió la semana pasada con el sondeo publicado por Grupo Reforma, donde Anaya exhibe dicho retroceso.

Todo esta situación tiene un correlato judicial muy delicado para el ex candidato presidencial. Anaya tiene un acuerdo con Alejandro Gertz Manero, que ha detenido el rumbo de las audiencias donde la situación de Anaya pudiera verse comprometida. Pero en paralelo, por solo mencionar los expedientes animados por Emilio Lozoya, el foco está puesto en Anaya. La centralidad solo es un hecho. Solamente Gertz digita los tiempos a su conveniencia.

Tiene lógica porque en el 2018, desde su claustro universitario, Gertz era un entusiasta absoluto de Anaya y lo veía como una opción para modernizar al país y avanzar con la impunidad.  López Obrador era la última opción del entonces académico. Giros del destino.

Anaya, por su parte, nunca ha criticado a Gertz. Tan alineado con la agenda de Washinton, nunca ha embestido contra el fiscal por la falta de grandes detenciones a capos del narco, como en algún momento se le sugirió.

El problema para Anaya es que si su declive se pronuncia en el tiempo, el pacto no escrito con Gertz pierde densidad y hacia el final del sexenio su situación judicial puede tornarse más sombría.

Hoy por hoy su candidatura presidencial luce congeleda aunque, debe decirse, inetersa fundamentalmente a aquellos actores del panismo que se vislumbran un futuro en el 2030.