Elecciones 2022

Con la victoria de Vance en Ohio, Trump se pone el traje de kingmaker y le da pelea a su propio partido

Su apoyo político y los fondos del millonario Peter Thiel dieron vuelta la tendencia. Pence hace su propia apuesta de cara a noviembre. Georgia, próxima batalla.

Sin competir en forma personal, Donald Trump acaba de lograr su primera victoria en el calendario electoral. El triunfo de JD Vance en la interna republicana no hubiera sido posible sin su apoyo y sin la inyección de fondos que el multimillonario trumpista Peter Thiel realizó en favor del vencedero de las primarias: nada menos que 15 millones de dólares en apenas unos días.

Guerra de magnates detrás de la interna republicana en Ohio

Una vez más, Trump demuestra que está dispuesto a competir y no duda en apostar en contra de los deseos del establishment partidario y de grupos de reconocido poder económico que invierten en candidaturas y proyectos como el Club para el Crecimiento. 

El autor del best seller "Hillbilly Elegy", que venía rezagado en la carrera contra sus rivales dentro del partido, levantó vuelo en las ultimas dos semanas gracias al respaldo público de Trump. 

El autor del best seller "Hillbilly Elegy", que venía rezagado en la carrera contra sus rivales dentro del partido, levantó vuelo en las ultimas dos semanas gracias al respaldo público de Trump y ganó finalmente este martes por el 32,2 por ciento de los votos sobre el 23,9 por ciento del ex tesorero de Ohio, Josh Mandel, y el 23,3 por ciento del senador estatal de Ohio, Matt Dolan. 

En noviembre, Vance se enfrentará al representante Tim Ryan (D-Ohio), que logró la nominación demócrata y peleará para ocupar la banca del senador Rob Portman (R-Ohio), quien se retira después de un largo período.

Para Trump, no solo es la demostración de que puede revertir la tendencia que marcan las encuestas sino que además es la confirmación de que puede calzarse el traje de "kingmaker" a la hora de elegir postulantes. 

De ahora en más y pese a que en las primarias solo votan los afiliados republicanos, su peso decisivo a la hora de ungir candidatos será un dato ineludible y, según distintos observadores, lo dejará en una posición destacada de cara a las elecciones de medio término. 

De ahora en más, el peso decisivo de Trump a la hora de ungir candidatos será un dato ineludible. 

El ex presidente necesitaba la victoria casi tanto como Vance: venía de perder con sus dos apuestas anteriores. En noviembre, su candidato para el Senado en Pensilvania, Sean Parnell, tuvo que retirarse después de que un juez concluyera en que había abusado de su esposa y le diera a ella la custodia de sus hijos. En marzo, retiró su respaldo en Alabama al representante Mo Brooks después de que las encuestas mostraran que no tenía chance de imponerse en las primarias para el Senado. 

Trump mantiene niveles de popularidad elevados en cuatro estados clave y sale a apoyar candidatos

El próximo viernes, Trump volverá a jugar en la contienda interna del partido. Hará campaña en las afueras de Pittsburgh con el médico Mehmet Oz, famoso como presentador en su programa de entrevistas. En una disputa de final abierto, Oz deberá enfrentar en dos semanas al exgerente de fondos de cobertura David McCormick.

Sin embargo, la batalla más dura que deberá enfrentar el ex presidente será el próximo 24 de mayo, en Georgia, donde su candidato, el ex senador David Perdue, corre desde muy atrás con el gobernador Brian Kemp.

Trump decidió enfrentar a Kemp enojado porque el gobernador no pidió anular los resultados de las elecciones de Georgia de 2020. Pero con esa decisión, el líder republicano también se lanza a un choque con su ex vicepresidente Mike Pence, que envió a su principal asesor Marc Short a colaborar con Kemp. No solo eso. En Georgia, anuncian un acto conjunto de recaudación de fondos del gobernador con el ex presidente George W. Bush antes de la fecha de las primarias.