El fallo de la Corte contra el aborto legal sacude la campaña y anima a los demócratas a pelear
En coincidencia con el inicio del calendario electoral, el borrador de un fallo de la Corte Suprema de Justicia que anularía el aborto legal generó un estruendo en Estados Unidos. Difundido por el sitio web "Político", provocó reacciones inmediatas del movimiento de mujeres y de los partidarios del gobierno y la oposición.
Apenas conocida la noticia y pese a que se trataba apenas de un borrador del fallo, unos y otros se congregaron desde el lunes a la noche frente al edificio de la Corte en Washington como parte de una disputa que parece haber tocado un cable de alta tensión entre los estadounidenses.
De confirmarse la sentencia, prevista para el mes de junio, los nueve jueces del máximo tribunal tomarían una decisión histórica, que echaría por tierra casi medio siglo de jurisprudencia en favor del derecho al aborto.
Nominan a Ketanji Brown Jackson para la Corte, la primera mujer negra que llegará al máximo tribunal
La opinión de la mayoría de los miembros de la Corte ha sido escrita por el juez conservador Samuel Alito, que fue nominado por George W. Bush y, en su quinta página, considera que "Roe versus Wade fue atrozmente erróneamente desde el primer momento". Alude así a la sentencia del Supremo de 1973 en virtud de la cual se legalizó el aborto.
El borrador difundido por Político habilita lecturas contrapuestas y tiene impacto en varios escenarios a la vez. En primer lugar, sorprende la filtración de un organismo que se caracteriza por la confidencialidad y da cuenta de las fisuras que se profundizan en su interior. En sus casi dos siglos y medio de existencia, la Corte de Estados Unidos no reconoce antecedentes de una filtración de esta magnitud, menos aún en un tema tan sensible.
El presidente de la Corte, John Roberts, confirmó este martes la autenticidad del borrador y ordenó una investigación sobre lo que llamó un "abuso de confianza atroz", pero negó que el documento represente la posición final de los jueces.
En segundo lugar, es una demostración de la debilidad del presidente Joe Biden, quien logró hace apenas dos semanas aprobar el ingreso de la jueza Ketanji Brown Jackson a la Corte, la primera mujer negra seleccionada para cumplir funciones en el máximo tribunal. Contra la pretensión de los demócratas, la mayoría se encaminaría a golpear a la administración Biden.
Biden y Kamala con la la jueza Ketanji Brown Jackson en los jardines de la Casa Blanca.
Sin embargo, los más optimistas partidarios de Biden suponen que ese mismo episodio puede funcionar como un cisne negro en una campaña que hoy los demócratas dan por perdida, con la inflación en el nivel más alto de las últimas cuatro décadas y la imagen del presidente en continuo deterioro.
La prohibición del aborto sería un motivo de movilización enorme para los demócratas en las elecciones legislativas de noviembre de este año e incluso también en las presidenciales de 2024. Pese a que todavía no se conoce más que el borrador del juez Alito, no son pocos los que ya especulan con que el tema puede convertirse en eje de la disputa camino a las elecciones de medio término. Uno de los primeros en advertirlo fue el presidente del Comité de Campaña del Congreso Demócrata, Sean Patrick Maloney (D-N.Y.), que escribió en Twitter: "Los republicanos acaban de destruir Roe v Wade, la garantía constitucional de la libertad reproductiva, y prohibirán el aborto en los 50 estados, si toman el control del Congreso (...) Solo los demócratas protegeremos nuestras libertades. Esa es ahora la elección central en las elecciones de 2022".
Mientras tanto, la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi (D-Calif.) y el líder de la mayoría en el Senado Charles Schumer (D-N.Y.) dijeron en un comunicado conjunto: "La Corte Suprema está preparada para infligir la mayor restricción de derechos en los últimos cincuenta años, no solo a las mujeres sino a todos los estadounidenses", dijo
Según The Hill, los demócratas han visto durante mucho tiempo la amenaza al derecho al aborto como algo que podría llevar a su base a las urnas y movilizar a sectores independientes que por ahora se han mantenido lejos de la disputa política electoral. Además, una encuesta de CNN realizada por SSRS en enero mostró que el 69% de los estadounidenses se oponía a la anulación de Roe y solo el 30% apoyaba esa medida.