Abogados

La pelea por el Colegio de Abogados de Córdoba rompió la grieta

El peronista Martín Llaryora y los radicales Negri, Mestre, De Loredo y el PRO se unieron para conducir el Colegio de Abogados de Córdoba.

Sin fisuras, los sectores que disputarán el poder en 2023 en Córdoba conformaron una lista de integración que ganó la conducción del Colegio de Abogados con un amplio margen: sacó el 45 por ciento de los votos y duplicó el caudal de la lista que salió segunda.

En la lista vencedora confluyeron abogados que responden (y militan) con Juan Schiaretti, Martín Llaryora, Mario Negri, Rodrigo de Loredo, Ramón Mestre y Oscar Agost Carreño, vicepresidente del PRO: Una muestra de que el partido cordobés es posible... al menos entre los abogados.

La lista estuvo encabezada por Ignacio Segura, actual presidente y asesor de la Municipalidad de Córdoba en los temas vinculados al Suoem, el combativo sindicato de empleados de la comuna, y amigo de Verónica Bruera, vicepresidenta saliente de la entidad y secretaria General de la gestión Llaryora.

En la nueva conducción estará Alejandra Ferraro, ex funcionaria de Ramón Mestre y actualmente tropa de De Loredo.

Antes de sumar a las diferentes tribus radicales y al PRO, Segura alineó a casi todo el peronismo, que en la elección anterior había llevado un candidato propio, Andrés Bauzá, el hijo del fallecido secretario General de la Presidencia de Carlos Menem. En esa lista también estuvo en 2019 Juan Manuel Aráoz, hijo del "Chiche" y jefe de la Justicia de Faltas de la Municipalidad.

Pero en esta elección, el PJ dejó en claro que considera a Segura "un tipo confiable". Antes, Segura avaló la designación del exministro de Justicia provincial Luis Angulo como vocal del Tribunal Superior de Justicia; ayudó al Ejecutivo municipal en la negociación con el Suoem y surfeó la etapa más dura de la cuarentena, cuando había numerosos cuestionamientos hacia la legalidad del confinamiento.

Segura alineó a casi todo el peronismo, que en la elección anterior había llevado un candidato propio, Andrés Bauzá, el hijo del fallecido secretario General de la Presidencia de Carlos Menem.

Sin fuego amigo a la vista, Segura encaró la ampliación de la alianza, tarea que dejó en manos de Juan Manuel Cid, el legislador que preside la comisión de Asuntos Constitucionales y uno de los pocos integrantes de la mesa chica de Llaryora. Así, el grueso de los abogados peronistas integraron la coalición que resultaría vencedora en los comicios del 12 de abril.

El sector de Negri integró al Colegio de Abogados a Julio Ochoa, tribuno de Cuentas de la Provincia por la oposición. David Consalvi, el presidente de ese organismo, es otro miembro del llaryorismo desde los primeros tiempos.

A Ramón Mestre no le fue mal en la negociación: además de que abogados de su espacio ocuparán una secretaría y una vocalía, él designará al asesor letrado del colegio, uno de los pocos cargos rentados de la entidad.

"Hay un punto fuerte, Martín (Llaryora) siempre miró para adelante, no judicializó la política y no hizo carpetazos; esto es un gesto de reconstrucción política", dice Cid, el armador de Segura. También aclara que el acuerdo del Colegio es sui generis, por lo que "no se traslada" a lo electoral.

Es un armado generacional, relacionado a lo local, por lo que no se puede proyectar acá las conversaciones que están manteniendo Schiaretti, Morales y referentes de Juntos por el Cambio.

El PRO está representado por Pamela Giletta, actual integrante de la conducción del Colegio de Abogados y destacada militante del partido en el cual su esposo, Oscar Agost Carreño, es vicepresidente y apoderado.

"Es un armado generacional, relacionado a lo local, por lo que no se puede proyectar acá las conversaciones que están manteniendo Schiaretti, Morales y referentes de Juntos por el Cambio", insiste Cid. "En todo caso, hay un sinergia de mayor armonía a la hora de hacer política en esta generación de dirigentes, que procura una relación más armónica", analiza.

En la rosca que forjó la nueva conducción del Colegio de Abogados no aparece ningún abogado que se referencie en Luis Juez. El dato no pasa inadvertido en los pasillos de la entidad: Juez fue quien llevó a prisión al exintendente Germán Kammerath.