Alemania escuchó a soldados rusos admitiendo el asesinato de civiles y teme una nueva masacre como la de Bucha
Alemania sospecha que la masacre de Bucha podría podría tratarse de un crimen de guerra premeditado y parte de la estrategia militar de Vladimir Putin en Ucrania. Y cuenta con indicios para pensarlo. El Bundesnachrichtendienst (BND), el servicio federal de espionaje, captó conversaciones entre soldados rusos en las que se alude al asesinato de civiles.
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El semanario Der Spiegel, que tuvo acceso exclusivo a esas conversaciones, reveló que un soldado admitió haberle disparado a una persona que andaba en bicicleta, mientras en otra de las charlas interceptadas se habla directamente de abrir fuego contra civiles. El BND considera que los soldados se refieren a las víctimas de Bucha, luego de comparar el contenido de las conversaciones con las fotografías que se difundieron en los últimos días.
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Las grabaciones coincidirían con la ubicación de los cuerpos encontrados en Bucha, lo que hace pensar a la inteligencia alemana que parte del plan de ocupación consiste en atemorizar a la población local. En ese marco, el asesinato de civiles no es una excepción, sino un accionar sistemático de las tropas rusas. Der Spiegel señala además que el Grupo Wagner, una empresa privada de mercenarios rusos vinculados al Kremlin, está involucrado en el asesinato de ucranianos.
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski visitó la zona de Bucha tras la masacre a manos de las tropas rusas.
La publicación alemana recuerda que Wagner "ha perpetrado atrocidades similares en Siria". Estados Unidos asegura que el grupo responde a Yevgeny Prigozhin, un empresario gastronómico que ha organizado eventos para Putin, y que ha intervenido en Libia, Mali, República Centroafricana y Mozambique. También sostiene que "algunos testigos presenciales han dicho que había unidades chechenas en la ciudad (Bucha)", que en parte explicaría el nivel de atrocidad registrado.
Si se comprueba la sistematicidad en los crímenes de guerra cometidos por Rusia, entonces cobraría fuerza la denuncia de genocidio por parte del presidente ucraniano Volodimir Zelenski. El BND tiene cada vez mayor certeza sobre matanzas como la de Bucha en otros puntos de Ucrania, un escenario más que probable en la ciudad de Mariupol, sitiada por el ejército ruso y con escasos bienes básicos para su población.
Tanques rusos destruidos en las calles de Bucha.
De hecho, el alcalde de Mariupol, Vadim Boichenko, aseguró que las tropas rusas están recurriendo a "crematorios móviles" para destruir las evidencias de sus crímenes. "Recolectan y queman los cuerpos de los residentes de Mariupol asesinados como resultado de la invasión", por lo cual "Rusia no tiene prisa por dar luz verde a iniciativas para salvar y evacuar por completo" la ciudad. Boichenko alertó además que los testigos de estos hechos están siendo "identificados y destruidos".