Alberto apela a la "diplomacia presidencial" para que Arce destrabe el envío de gas
El próximo viernes a las diez de la mañana Alberto Fernandez recibirá en Casa Rosada a Luis Arce, su par boliviano que concretará su primera visita oficial a la Argentina. El único tema de agenda es la provisión de gas que Bolivia viene incumpliendo sistemáticamente, inmune a todas las apelaciones del Gobierno a la hermandad latinoamericana.
El estado de situación actual es que se encuentra vencido el período de prorróga de la quinta adenda del convenio firmado entre ambos países sobre provisión de gas boliviano en precios y cantidades, que el país andino viene incumpliendo cada vez en mayor volumen. Por un lado esto se explica por el declino progresivo de su producción de hidrocarburos pero también porque a Bolivia le conviene venderlo a Brasil dado que este país convalida un precio mayor, acorde a la cotización internacional, muy lejos del tope fijado en el acuerdo con la Argentina.
Sobre el límite, Argentina y Bolivia acuerdan seguir negociando el contrato del gas dos meses
Según la cancillería fue Alberto quien solicitó la reunión "Hace meses que vienen negociando las áreas técnicas y no se terminaba de resolver" Por eso ahora el intento es resolver la cuestión "en una reunión entre presidentes" afirmó una fuente que orbita bajo el ala de Cafiero "Santiago venía hablando con su par boliviano hace meses pero esto venia bastante trabado" explicó
Lo cierto es que las negociaciones se cursan a través de la estatal Yacimiento Petrolíferos Fiscales Boliviano y la argentina IEASA. Es decir, son de Estado a Estado en los hechos.
La última adenda al contrato que finalizó en diciembre, implicaba un suministro diario de 10,7 millones de metros cúbicos en verano y 18 millones de metros cúbicos en invierno. Estos volúmenes son a su vez una renegociación del contrato del 2020 que establecía un suministro diario todo el año de 21,3 millones de metros cúbicos diarios.
La incapacidad de Bolivia para cumplir con la demanda de gas de Argentina data de 2006, y es consecuencia de la declinación de la producción de hidrocarburos en el país andino. Cuando en ese año se firmó el primer contrato, Argentina consumía 39 millones de metros cúbicos diarios de gas, volumen que en diciembre de 2021 aumentó a 41 millones de metros cúbicos diarios. De todos modos, el pico se registró en 2015 con un una demanda de 60 millones de metros cúbicos diarios.
"Según nuestras estimaciones lo máximo que puede enviar Bolivia durante este año apenas se acerca los 10 millones de metros cúbicos diarios", agregó una fuente del sector
Desde la cancillería resaltaron que si bien "todavía no hay nada cerrado", el dato no oficial es que Scioli, embajador en Brasil, realizó gestiones exitosas para que el gobierno de Bolsonaro ceda parte de sus importaciones de gas para que pueda adquirirlas la Argentina. De esto se desprende que lo que esta sobre la mesa de negociación es una actualización sobre los precios