Podemos denuncia un "movimiento extraño" en el ascenso de Delgado y rompe la tregua con Sánchez
La tregua duró poco, menos de una semana. Una nueva brecha parece abrirse en el gobierno de coalición. La propuesta del Psoe de enmendar una ley para ascender a la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, chocó con la negativa de Unidas Podemos, que ya adelantó que no apoyará el proyecto. "Es un movimiento extraño", dijo, sorprendido, el portavoz morado en el Congreso, Pablo Echenique.
Los socios de gobierno habían encontrado algo de paz con el consensuado plan anticrisis que el presidente Pedro Sánchez anunció a principios de semana. Podemos forzó al Ejecutivo a contemplar muchas de sus exigencias para aliviar la economía de la calle, como el veto a los despidos, el límite a la subida de alquileres y el aumento del Ingreso Mínimo Vital.
La ministra de Derechos Sociales y líder del partido, Ione Belarra, sacó pecho por ser el "nuevo escudo social" frente a la crisis. "Hemos trabajado intensamente para construir un nuevo escudo social. Queda mucho por hacer pero somos la mejor garantía para cuidar a la gente", se jactó al oficializarse los detalles del plan.
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El acercamiento entre los socios en un tema central de la agenda del Gobierno parecía dejar atrás una seguidilla de diferencias (el envío de armas a Ucrania, el aumento del gasto en Defensa y el giro diplomático con el Sahara Occidental) que amagó con romper la legislatura.
La fiscal general de Estado, Dolores Delgado.
Pero las tensiones siguen latentes. En Podemos cayó muy mal la unilateral decisión del Psoe de enmendar la ley concursal para poder garantizar el ascenso automático de Dolores Delgado, la fiscal general del Estado.
La propuesta socialista pretende que un fiscal general del Estado, en este caso Delgado, adquiera de forma automática el cargo de fiscal de sala del Tribunal Supremo al ser cesado. Sin esta modificación, la actual jefa de los fiscales tendría que retomar su plaza en la Audiencia Nacional, un cargo menor y "no digno", según entiende el Gobierno.
El argumento principal es que este ascenso automático a la máxima categoría de la carrera judicial "favorece la independencia del fiscal general". Para el Psoe, este "trampolín" evita que el fiscal general no actúe sujeto a derecho por temor a posibles presiones políticas o judiciales durante su mandato. La garantía de un ascenso disipa cualquier condicionamiento y puede mejorar las funciones del fiscal general de turno.
La propuesta, como era de esperar, fue rechazada por la derecha. PP, Ciudadanos y Vox denunciaron un "gravísimo ataque a la división de poderes". Podemos se sumó este jueves a la ola de rechazos.
Echenique explicó en los pasillos del Congreso que el Psoe no les informó de esta enmienda, que UP no comparte el contenido y que se trata de "un movimiento extraño" del socio de coalición.
El portavoz del UP en el Congreso, Pablo Echenique.
El portavoz reconoció estar "sorprendido" por la "defensa sin fisuras" que hace el Gobierno a esta enmienda y adelantó que su formación no respaldará el proyecto por dos motivos: no comparte su contenido y es un asunto ajeno a la ley concursal.
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Más duro fue el diputado Roberto Uriarte, quien en sus redes sociales denunció que el Psoe quiere enmendar ley concursal para "colar" un "ascenso" de la Fiscal General del Estado, lo que supone a su juicio una "aberración jurídica.
Un argumento similar esgrimió la Asociación de Fiscales para distanciarse de la propuesta del Ejecutivo. "Consideramos inaceptable que se introduzca una modificación de tal calado, sin publicidad y hurtando de toda posibilidad de alegación al Consejo Fiscal y al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), así como a las asociaciones de fiscales y en general, a toda la Carrera Fiscal", cuestionó mediante en un comunicado.
Desde esta Asociación, mayoritaria en la carrera fiscal, sospechan que el objetivo de realizar esta reforma apresuradamente y de forma "silenciada" denota el interés en beneficiar directamente a la actual fiscal general del Estado (FGE), dándole una salida al cese de su mandato y creando "una solución ad hoc" que no puede ser la finalidad última de una norma.