Crisis Energética

Boris Johnson pidió terminar con la "adicción" al gas ruso y le metió más presión a los precios

El Reino Unido suscribió al planteo de Estados Unidos. Rusia abastece apenas el 5% del suministro eléctrico ingles, y no le vende a EEUU, en el resto de Europa el combustible eslavo represnta un 40% sobre el total de consumo

Rusia es el tercer país productor de hidrocarburos del mundo, detrás de Estados Unidos y Arabia Saudita. El gas ruso representa cerca del 40% de las importaciones de la Unión Europea. En tanto, Rusia solo proporciona alrededor del 5% del suministro de gas de Reino Unido, y EE.UU. no importa gas ruso. 

Putin rechaza el dólar y el euro y exige que le paguen el gas en rublos

Esto explica que al momento solo Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron que dejaría de importar petróleo ruso recién para fin de año, mientras que la Unión Europa se comprometió a reducir gradualmente las compras de gas a Moscú en dos tercios.

"El ataque brutal por parte de Vladimir Putin, presidente de Rusia, sobre Ucrania generará consecuencias de largo alcance para el mundo entero" destacó Johnson "cuando miramos la dependencia que Occidente ha desarrollado al petróleo y el gas de Putin, podemos ver el grave error, pues lo aprovechará para chantajearnos", puntualizó.

Terminar con esta adicción (por el gas ruso) es fundamental para acabar con la estrategia bélica del Kremlin, pues se quedará sin recursos económicos, justo en el momento en el que el país atraviesa por un alto gasto fiscal.

Es por eso que para el primer mandatario británico "sin duda alguna, la crisis traspasará las fronteras de Europa" y remarcó que "el ataque brutal de Vladimir Putin, presidente de Rusia, sobre Ucrania generará consecuencias de largo alcance para el mundo entero"

Según Johnson "terminar con esta adicción es fundamental para acabar con la estrategia bélica del Kremlin, pues se quedará sin recursos económicos, justo en el momento en el que el país atraviesa por un alto gasto fiscal".

En este sentido cabe destacar que los europeos se están moviendo para aumentar la capacidad propia de generación de recursos en la medida de las posibilidades. La eléctrica alemana Uniper y la noruega Equinor inician planes para aumentar la disponibilidad de este recurso en todo el continente