El kirchnerismo logra sacarle la conducción de la UOM a Caló
Un impactante giro político se está gestando en la Unión Obrera Metalúrgica. En una jugada inesperada, el kirchnerismo logró desplazar de la conducción a Antonio Caló y el ex diputado nacional Abel Furlán será el nuevo secretario general del gremio.
La movida se selló en las últimas horas tras una rebelión de las seccionales de la UOM que trabajó en silencio Furlán, que es consejero del PJ bonaerense y tiene una muy buena relación con el kirchnerismo. Tras conseguir el apoyo de otras seccionales grandes del interior y asegurarse los votos para la elección de delegados que se realiza este martes, Furlán abrió una negociación con Caló para una lista de unidad pero éste no aceptó y quedó fuera de la nueva conducción
La rebelión contra Caló es también un coletazo de la interna que a nivel nacional vive el Frente de Todos. El actual secretario general es un albertista puro y muy crítico de Cristina, pese a que durante su gobierno fue un leal. En las últimas elecciones seccionales se impusieron varios sectores del kirchnerismo que pretendían una postura más dura a la conducción nacional, que entre otras cosas viene aceptando los topes salariales que impone la Casa Rosada.
Furlán es el titular de la seccional Zárate-Campana, una de las más importantes de la UOM, y desde ese lugar fue tejiendo apoyos en base a un malestar creciente con Caló, que es el líder de la seccional Capital.
Los primeros apoyos que consiguió Furlán fue en el Conurbano con las seccionales de San Martín, La Matanza, San Miguel y Quilmes (donde el Barba Gutiérrez perdió su histórico liderazgo ante una lista promovida por el kirchnerismo).
Furlán con Caló
Pero el movimiento clave fue el apoyo de la seccional Avellaneda, la más numerosa en afiliados, que históricamente ocupó la secretaría adjunta del gremio a nivel nacional. Pero Caló está enfrentado a su titular, Daniel Daporta, y le armó una lista que perdió la elección local la semana pasada. El quiebre definitivo lo marcó la decisión de Caló de correr a Avellaneda del lugar de número dos del sindicato nacional.
Furlán logró el apoyo de Avellaneda y luego se apuntó las seccionales de Rosario y Mendoza, entre otras del interior del país. Con los números a su favor el ex diputado logró sellar un acuerdo con Naldo Brunelli, el histórico líder de San Nicolás y a quien Caló pretendía ubicar como su nuevo número dos.
De buena relación con Axel Kicillof, Brunelli cambió de lado y ahora será número dos de Furlán. Ese lugar estuvo en duda porque en un principio le fue ofrecido a Caló para que ubique a alguien de la seccional Capital y se logre una lista de unidad. Pero Caló rechazó la propuesta y quedó totalmente afuera.
Brunelli es señalado como el arquitecto de la jugada que desbancó a la actual conducción. "Si Brunelli cerró con Furlán, ya fue Caló. Sería raro que Brunelli haya cerrado sin que Furlán tenga los votos", había anticipado a LPO una fuente que conoce al detalle los movimientos del gremio.
La misma fuente advirtió que el giro histórico de la UOM, que desde 2004 conducía Caló. "Si Furlán es el nuevo secretario general es un problema para el próximo gobierno, si es que gana la oposición. Con Furlán se viene una etapa mucho más dura de la UOM", agregó la fuente.
El recambio en la UOM también tendrá impacto en la CGT, donde el kirchnerismo tiene actualmente como principales espadas a Pablo Moyano (camioneros), Sergio Palazzo (bancarios) y Ricardo Pignanelli (Smata), aunque en franca mejoría. Con el histórico gremio de metalúrgicos de su lado, el kirchnerismo logrará una representación mucho más fuerte en la central.