Senado

Cristina acepta el reclamo de Juntos y los deja presidir comisiones

Lo decidió en una reunión con Mayans, Fernández Sagasti y Alonso, quienes luego se reunieron por la oposición. El oficialismo tendrá mayoría en todas.

Cristina Kirchner mantendrá a Juntos por el Cambio con presidencias de algunas comisiones en el Senado, después de un pedido para quitárselas de los referentes del Frente de Todos en represalia al fallido intento de dejar la última sesión sin quórum.

Así le indicó al jefe de bloque José Mayans y su segunda Anabel Fernández Sagasti, quienes luego se lo comunicaron a las autoridades de Juntos por el Cambio: los radicales Alfredo Cornejo y Luis Naidenoff; y Humberto Schiavoni, del PRO. La propuesta oficial llegará antes del 24 de febrero, cuando habrá sesión preparatoria para renovar autoridades. 

Mayans no cedió en que la integración de las comisiones continúe con mayoría oficialista, porque pese a haber perdido 6 bancas en la última elección, su bloque es el más grande con 35 senadores. Y en el recinto llega al quórum propio con dos aliados: Alberto Weretilneck (Río Negro) y Magdalena Solari Quintana (Misiones). 

Además, podría engrosar esa lista Vega y la cordobesa Alejandra Vigo, esposa del gobernador Juan Schiaretti, quien no está dispuesta a responder órdenes de radicales.

Como anticipó LPO, Mayans y sus dirigidos no cicatrizaron lo ocurrido en la sesión del 29 de diciembre, cuando Juntos se negó a ocupar sus bancas conocido el contagio de Covid del oficialista catamarqueño Guillermo Andrada y casi frustra la sesión. No pasó, porque la riojana Clara Vega, habitual aliada opositora, le dio quórum al oficialismo.

Antes hubo fuertes discusiones en el salón azul del palacio entre Mayans y Cornejo, que se repitieron en la reunión de este martes. El formoseño tampoco le perdona alterar acuerdos de labor parlamentaria en las sesiones previas, que estuvieron varias veces por caerse porque los opositores se iban. 

En aquellas discusiones de diciembre, cuentan en el oficialismo, Cornejo y Naidenoff se excusaban en un planteo del electorado para votar "todo en contra". 

Cristina podría sacarle a Juntos sus presidencias de comisiones en el Senado

Con ese dato, en sus primeros contactos del año los senadores del Frente de Todos le pidieron a Mayans quedarse con las presidencias de comisiones cedidas a Juntos en 2019, algunas de alta exposición como Salud y Recursos Naturales, que encabezaron el radical Mario Fiad y la macrista Gladys González.

Mayans le trasladó la propuesta a Cristina hace quince días, con un detalle no menor: el reglamento nada dice sobre el reparto de fuerzas equitativo en las presidencias de las comisiones. Sólo indica que sean elegidas por la mayoría de sus integrantes. 

Anabel Fernández Sagasti y José Mayans. 

Pero este martes, Cristina optó por no jugar tan a fondo y le sugirió a Mayans mantener la misma cantidad de presidencias que ya tienen la UCR y el PRO, aunque no necesariamente las mismas. Salud la lideraría el tucumano Pablo Yedlin, del Frente de Todos.  

Cornejo le exigió una proporcionalidad en la integración de las comisiones, pero no lo consiguió. Surge un problema para la oposición: si Weretilneck o Solari Quintana las integran le dan la mayoría al oficialismo, como ocurre en la de Presupuesto que se creó en diciembre. 

El mendocino envió una carta para reclamar equidad en esa comisión pero no lo consiguió y quiere lograrla en las demás. No será sencillo porque aún sumados, los bloques de Juntos por el Cambio no igualan la representación del oficialismo.   

Según testigos de la reunión, Mayans se sacó la bronca acumulada con Cornejo y le lanzó una advertencia: si vuelve a burlar un acuerdo de labor parlamentaria, perderá la presidencia de las comisiones que le concedan. 

"Mayans tiene que entender que si hay una anomalía una vez, la habrá siempre. Y eso no lo podemos permitir", explican cerca del mendocino, que no oculto su sorpresa por el trato del formoseño. 

En la reunión participó la secretaria administrativa María Luz Alonso, quien el 3 de enero echó a 40 empleados de la UCR por pasar dos años sin presentarse a trabajar, motivo de reproches de algunos referentes del partidos centenario. Ya no es un tema de agenda.