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Exclusivo: José Murat ya habla de comprar La Jornada para jugar en la sucesión de AMLO

Las conversaciones con Carmen Lira y el guiño de Palacio. La tensión con Adán Augusto y el difícil equilibrio en la redacción.

 El ex gobernador priista de Oaxaca José Murat analiza adquirir el matutino La Jornada de modo de hacer pie en la arena mediática de cara a la sucesión presidencial en 2024. El titular de la Fundación Colosio, y articulista  del periódico ya intentó la transacción en el pasado pero chocó con la negativa de Carmen Lira, directora y mandamás en la cooperativa controlante.

Según Murat, el giro en la actitud de Lira respecto a la propiedad de La Jornada se debe a que observa que Marcelo Ebrard gana terreno en la disputa por la sucesión y que ella solo estaría interesada en seguir a cargo del periódico en caso de que Claudia Sheinbaum llegue a la presidencia en 2024.

Para entender: Lira es de las personas más influyentes en el entorno de Andrés Manuel López Obrador y sumamente identificada con el sector purista e ideologizado de la 4T. A este círculo no le agrada la prominencia de los militares en el Gobierno y tampoco la idea de una sucesión abierta que pueda dar aire a actores como Ebrard o Ricardo Monreal.

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En este sentido, a Lira no le gustó el desembarcó de Adán Augusto en Segob. Rechaza ciertos comportamientos  políticos del ex gobernador de Tabasco y quedó en evidencia con el detalle de que el día de la designación el flamante secretario solo mereció un espacio ínfimo en la portada del matutino.

La meta de Murat tiene sus complicaciones. La Jornada está controlada por una cooperativa, lo cual dificulta cualquier transacción. A esto se agrega que el jefe de la sección Opinión, Luis Hernández Navarro, un periodista de fuerte predicamento en la redacción, rechazaría su desembarcó, al igual que el coordinador editorial, Josexto Zaldúa. Ambos conforman, por pensamiento y trayectoria, el sector más ultra de la publicación.

Murat tiene buena llegada a Palacio y su hijo Alejandro, gobernador oaxaqueño, se prepara para traspasarle el poder a Morena en 2022 y luego acceder al gabinete. En privado habla de planes de expansión y crecimiento de un periódico que recibe millones de pesos mensuales desde que López Obrador es presidente pero que todavía carga con complicaciones de diversa índole.