Acción Nacional

Anaya quiere volver a la política y pide a Marko una pluri para coordinar San Lázaro en 2021

"Se los advertí", su gran argumento. Busca encabezar la oposición a la 4T en el Congreso y opacar así el protagonismo de Felipe Calderón.

La oposición poco a poco empieza a estabilizarse tras el tsunami de Morena en 2018. En el caso de Acción Nacional, su fragilidad se confirmó este 2 de junio, donde dos bastiones albiazules pasaron a manos del partido del presidente López Obrador. Mientras tanto, el PRI lidia con un proceso interno que parece fragmentarlo en lugar de fortalecerlo.

Por su parte, México Libre de Margarita Zavala -la gran competencia en el espectro político de la derecha- presenta complicaciones que han hecho proferir declaraciones pesimistas a la exprimera dama. "Lo hacemos este año o esperamos hasta el 2025", dijo la esposa de Felipe Calderón.

En tales circunstancias, Ricardo Anaya busca el mejor escenario para regresar a la vida pública del país y renunciar al fin a su autoexilio en la Universidad de Columbia, desde donde monitorea la actividad política mexicana. Así lo revelaron fuentes al interior del CEN del PAN, quienes explicaron a LPO que el excandidato presidencial solicitó a Marko Cortés preparar un aterrizaje seguro.

Marko se entusiasma con Delgado y su postulación a dirigir Morena

Según la misma fuente, el análisis que hace la dirigencia panista -en el que también están involucrados los gobernadores albiazules- giraría en torno a una premisa: "Se los advertimos". Con este discurso y el perfil de Anaya Cortés, el PAN activaría una campaña sucesoria en contra de la Cuarta Transformación y el presidente López Obrador.

"Nos vemos en 2021", "¡Ya verán en 2021!", "Se acerca 2021", son el corazón de la campaña panista. Tienen a su favor que las mediciones demoscópicas anticipan una caída en la popularidad de AMLO en los siguientes meses y, sobre todo, el incremento en el rechazo al partido marrón y sus candidatos. Una lectura que comparte la mayoría de los analistas políticos al ver las encuestas.

El plan de Anaya, señalan los panistas a esta redacción, sería forzar un movimiento ondulatorio a favor de su partido, el cual aprovecharía el propio impulso de Palacio Nacional: fifís y chairos. "Le dieron la oportunidad al Nuevo PRI, y no funcionó. Ya probaron con Morena y fue un fracaso. Nos toca: es la hora del PAN", insisten en el CEN panista.

Y ponen como prueba que en México Libre saben que esa es la debilidad del Movimiento de Regeneración Nacional: la polarización. De ahí el protagonismo de un actor tan polarizante como Felipe Calderón. Sin embargo, antes de que ocurra otra cosa, Anaya estudia la pertinencia de dirigir a su grupo parlamentario en San Lázaro y así impedir al expresidente cualquier liderazgo. 

"Él es parte del pasado, de esos que ya tuvieron su oportunidad", dice Anaya sobre Calderón, ante quien mantiene una franca enemistad pero no cierra la comunicación a través de terceras personas. Vincular al exmandatario con Peña y AMLO, y recordar su guerra contra el peñanietismo -hoy en entredicho- serían parte de su regreso por la puerta grande a la realpolitik de México.