Salgado dice que podría acordar con Guerra para eyectar a Gracia del control del PAN
Opera a gran velocidad el alcalde electo de San Nicolás Zeferino Salgado en su plan para quitarle el control del panismo regio a Raúl Gracia, que viene sacudido por la derrota de San Pedro Garza García y la incertidumbre legal de Monterrey y Guadalupe. En un giro de gran pragmatismo Salgado ahora dice que él podría dejar a Mauro Guerra en la conducción del Partido si este estuviera dispuesto a alinearse con el Grupo San Nicolás y ceder las posiciones que este sector reclamará si consigue el control. Debe decirse que a Guerra no le quedarían demasiadas opciones en el horizonte.
El dirigente panista carga ahora con un nuevo lastre que es el hecho de que Francisco Cienfuegos, con una bancada mínima, comenzó a adueñarse del Congreso local mientras que el PAN siendo la primera fuerza observó con candor los acuerdos del PRI, el PT, Morena y lo que quede del PES. Esto por no mencionar que hasta el pasado jueves Guerra decía que era factible negociar y acordar con Morena. Comentarios, a todas luces, fuera de la realidad.
Desde mañana martes en el Palacio de Cantera confían en relanzar la relación de El Bronco con AMLO, que llega de visita a Monterrey. El evento se organizó hace dos semanas en una reunión en CDMX entre Alfonso Romo, el gobernador y el secretario de Enlace con la Federación Waldo Fernández. Contribuye activamente a esa sintonía, a su modo, el empresario Eduardo Garza T., de Frisa.
Sobre las elecciones de Guadalupe y Monterrey. Desde la Sala Regional nos explican que antes que tomar esos casos los magistrados están dedicados a conflictos similares en Tamaulipas y que estos tienen prioridad porque allí los alcaldes deben asumir el 1 de octubre. O sea que los casos regios podrían ser abordados recién el mes que viene. A esperar.
Comienza desde esta semana el complejo reparto de posiciones y cargos en el Congreso local. Debe anotarse llamativa centralidad que comienza a manifestar en estos asuntos el restaurantero Juan Antonio Salinas, dueño de la cadena El Camarón Norteño y de muy buena relación con el ex gobernador de Tamaulipas Egidio Torre Cantú. Salinas es un activo sponsor de la alianza "PRIMOR".
En pocos días será efectiva la mudanza de Movimiento Ciudadano de su sede en el Barrio Antiguo a otra locación en La Purísimo. La instalación actual es envidiable y cuenta con unos espacios superiores a los del PRI y PAN. El problema es que hay que dejarla porque la rente de la propiedad la lleva una agencia con relaciones complejas a nivel político y que no convienen a la imagen que el partido naranja pretende construir.