El PAN pide que Márquez Colín anuncie fecha de traslado de Economía a Nuevo León

 Incertidumbre en el proceso del traslado de la secretaría de Economía a Monterrey comienza a ser percibida al interior de las cúpulas industriales de Nuevo León. Se trata del sector de la inversión privada que miró con buenos ojos la designación de Graciela Márquez Colín a la dependencia pero que al mismo tiempo pide mayor detalle en el proceso de transición.

Alfonso Robledo, diputado federal electo del PAN, ya ha señalado como favorable el plan de Andrés Manuel López Obrador sobre la descentralización de las dependencias del Gobierno Federal, avalando que el estado del norte es un territorio altamente industrial y posee el mayor flujo de inversión extranjera directa.

Sin embargo, Robledo apunta que tanto la Caintra como destacados miembros de la IP regiomontana esperan una resolución pronta del plan transitorio que Márquez Colín prevé para los próximos meses.

Este sector mantiene su preocupación en que figuras del siguiente gabinete como Esteban Moctezuma o Rocío Nahle ya anunciaron que a partir del 1 de diciembre van a despachar las secretarías de Educación y de Energía a Puebla y Tabasco respectivamente.

Contrario a esto, los planes en Economía no han dado una mayor exposición fuera de las intenciones de AMLO de trasladarlo al estado de Nuevo León. Las dudas centrales del sector industrial radican en la fecha en que comenzará la transición, la infraestructura contemplada y si serán migrados los 3 mil trabajadores de la secretaría o si se generarán esos empleos en la entidad.

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Robledo ya comienza a gestionar con Márquez Colín una reunión en la que se puedan detallar los puntos principales del caso y las dudas del sector empresarial sobre las funciones en materia económica una vez establecida la dependencia en Monterrey.

Un apunte: existe la creencia en ciertos sectores de la IP que las declaraciones del presidente electo de hacer una consulta pública sobre la descentralización de las dependencias podría interpretarse como una medida para finalmente no concretar la promesa de campaña.