Comercio

Análisis: Alianza del Pacífico, Unión Europea y Sudamérica, desafíos de Márquez en Economía

La economista deberá cerrar varios frentes abiertos. El TLCAN será renegociado, pero desde la Cancillería.

La futura encargada de la Secretaría de Economía en el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Graciela Márquez Colín, heredará la responsabilidad de concretar la diversificación de mercados a otros países, el ‘Plan b' que lanzó la administración de Enrique Peña Nieto para hacer frente al incierto futuro del TLCAN bajo el Gobierno de Donald Trump.

El actual encargado de estos temas, Ildefonso Guajardo, logró avances en más de uno de estos mercados, pero aún faltan ciertos ajustes: por ejemplo, en el TPP-11, que luego de años de discusión tras la salida de EU, finalmente se firmó este marzo en Chile. 

En ese acuerdo aún resta la ratificación de los Congresos de los demás países para que entre en vigor. Por lo pronto esa es una tarea librada para Márquez Colin, pues en México ya fue avalado por el Senado.

Es un caso parecido el que corre para el acuerdo con la Unión Europea (TELCUEM), donde también se espera el visto bueno de la parte legislativa de ambas regiones.

Fue un acuerdo difícil para Guajardo ante los múltiples puntos de controversia que fueron encontrándose y a pesar de que desde diciembre del año pasado se mandaba un discurso positivo en Economía sobre la resolución de estos diálogos, en febrero parecía diluirse por la falta de acuerdo en etiquetado de bienes.

Ahora que llegó un acuerdo, la dependencia aún aguarda que sea aprobado en el Parlamento Europeo, pero ya se anticipa como un proceso lento: la dependencia no espera que pueda concretarse antes de diciembre. Ese objetivo pasaría también a las manos de Márquez, según pudo saber LPO.

Habrá otros temas en que la economista tendrá que asumir un papel mayor. Ahí se contará, por ejemplo, el fortalecer los lazos hacia el sur del continente en países como Brasil y Argentina. Con este último el Gobierno de Peña Nieto ha tenido varios acercamientos y Mauricio Macri se ha mostrado interesado en negociar un acuerdo de libre comercio.

En cuanto a Brasil, también se han hecho encuentros con productores de ese país, incluso de manera privada. Hay que recordar que ante las negociaciones por las tensiones del TLCAN, en 2017 los productores mexicanos habían importado 10 veces más maíz de ese país que el año anterior. Sin embargo, en ambos casos los resultados de las negociaciones de la actual administración son aun difusos.

En otros temas la cargada será mayor, como en el caso de un tratado con Turquía. La negociación ya la arrancó el equipo de Guajardo. En febrero del año pasado ambos países acordaban acelerar las negociaciones, no obstante, el tiempo evidenció lo contrario. La lectura desde Economía es que con el gobierno de Recep Tayyip Erdoğan, se vuelva a encarrilar ese pendiente.

Por su puesto, el lado con más peso para la relación comercial exterior de México es Estados Unidos no obstante la artillería pesada no la comandará Graciela, sino el siguiente canciller, Marcelo Ebrard, que ya arrancó con acercamientos entre el gobierno electo mexicano y el de Donald Trump, hasta ahora, apuntando a un resultado positivo, según confirmó el mismo mandatario estadounidense.