Licitaciones

Coldwell alista el último paquete de farmouts para Pemex

Es la herramienta para incrementar al corto plazo la producción petrolera. Las expectativas.

 En octubre, la administración de Enrique Peña Nieto echará a andar su último concurso para que empresas privadas puedan asociarse con Pemex. Se trata de un paquete para siete clústers en aguas someras altamente esperado, pues se ve como una herramienta fundamental para incrementar la producción petrolera en el corto plazo.

El mercado se encuentra con gran expectativa sobre este último proceso pues podrá garantizar la posibilidad de sumar socios para la petrolera mexicana, cuyas complicaciones financieras y operativas han sido ampliamente documentadas y por lo cual su dirección, a cargo de Carlos Treviño, ha realizado un fuerte trabajo en el exterior para mostrar las bondades de la reforma energética.

Se trata de contratos -de exploración y explotación- que adquirió la petrolera mexicana en la Ronda Cero y que gracias a la reforma, pudieron migrar para poder realizar los farmouts. Con ello, Pemex tendrá el 45% de los contratos y podrán participar empresas privadas que funcionarán como operadores, ya sea con 55% de la participación en caso de que sea una empresa en los individual, o con al menos 30% de participación si es un operador que participa agrupado con otros socios.

La finalidad de estas asociaciones es poder mejorar las capacidades de ejecución e inversión de la empresa que dirige Treviño y así reducir riesgos. La expectativa de la Secretaría de Energía que encabeza Pedro Joaquín Coldwell es incrementar en 75% la extracción actual en estas áreas y llegar en el 2022 a un pico productivo de 58,000 barriles diarios de crudo.

Los siete clústers que abrirá el Gobierno a la inversión privada junto con Pemex suman una superficie de 4,580 kilómetros cuadrados en los bloques denominados: Artesa, Bedel-Gasífero, Juspí-Teotleco, Giraldas-Sunapa, Cinco Presidentes, Bacal-Nelash y Lacamango, ubicados en Veracruz, en el caso de Bedel-Gasífero y Lacamango, mientras que los cinco restantes están en Tabasco y el bloque Giraldas-Sunuapa abarca una parte pequeña de Chiapas.

Especialistas del sector energético confirmaron a La Política Online el interés por estos campos entre los inversionistas petroleros, sobre todo por el bajo riesgo que implican estos campos, que ya cuentan con una producción pequeña.

"En algunos casos ya dan algunos miles de barriles diarios y ayudará para incrementar esa producción y en otros casos será exploración", señaló a LPO Arturo Carranza, analista del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP).

En coincidencia, Ramsés Pech también explicó que el interés esperado por parte de los privados es porque son herramientas que implican un "ganar-ganar", tanto para Pemex como para las otras empresas. Y lo prepara para dar el siguiente paso: el terrestre. Consideró.

"Además, la petrolera ha seguido mandando el mensaje de que está caminando", agregó Carranza, aunque también criticó la tardanza de este proyecto, lo cual acaso está relacionado con los ajustes necesarios para los contratos.

Hay que recordar que un mes antes, en septiembre, el Gobierno también llevará a cabo las últimas dos licitaciones de la Ronda tres, que incluirá la subasta de campos no convencionales, es decir, gas shale.