Comercio

Ross vuelve a condicionar aranceles al avance de la negociación del TLCAN

Ante el comité de Finanzas del Senado mostró optimismo de que las pláticas tomen impulso tras el 1 de julio.

Las expectativas de llegar reanudar las negociaciones del TLCAN después del proceso electoral en México se agudizan y para Estados Unidos, la presión arancelaria sobre sus contrapartes les hace creer que podrán lograr un acuerdo pronto.

Desde mayo, la posibilidad de que los representantes de comercio de México, Canadá y Estados Unidos se volvieran a reunir para seguir las negociaciones del TCLAN quedó congelada, mientras que la administración de Donald Trump impuso a inicios de junio aranceles a las importaciones de acero y aluminio a sus vecinos de la región. Ambos, respondieron con medias espejo.

Si bien el argumento inicial de Trump de estos aranceles era el de proteger la seguridad nacional, muy pronto quedó evidenciado que era una forma de presionar a ambos países a ceder en los intereses estadounidenses en temas como reglas de origen, solución de controversias o la cláusula ‘sunset'. Este miércoles, Wilbur Ross volvió a ponerlo sobre la mesa.

"Nuestro objetivo es tener un TLC revitalizado, que ayude a América. Y como parte de ese pacto, los aranceles impuestos bajo la Sección 232 se cancelarían, lógicamente", indicó Ross en ese comité financiero, en el que se analizó la imposición de los gravámenes impuestos al acero y al aluminio, durante su participación en el Comité de Finanzas del Senado, Ross.

Ante los legisladores, aseguró que tanto él como el encargado de las negociaciones para el nuevo TLC, el responsable de Comercio Exterior, Robert Lighthizer, "son optimistas de que las conversaciones retomen impulso" con el nuevo Ejecutivo mexicano.