Mercados

El peso cayó por cuarta jordana consecutiva y el dólar se acerca a los $21

La fortaleza de la economía de EU impulsa al dólar. El peso cayó 4.9%. Diferencias con Argentina y Brasil.

La economía de Estados Unidos empieza a lucir más atractiva de lo que el mercado financiero hubiera esperado hace algunos meses y eso ha llevado a un fortalecimiento paulatino pero persistente del dólar en relación con las monedas emergentes. México no es la excepción: el peso ya hiló cuatro días a la baja. Aún así, no es la caída más dramática de la región.

En lo que va de 2018, el peso mexicano lleva una devaluación de 4.9% frente a la divisa estadounidense. La tendencia comenzó en abril, cuando ya se veía una caída de hasta 2.46%, pero la constante opinión de los especialistas es que no responde a un tema doméstico, sino a un fenómeno mundial.

Cerca de julio, el consenso sigue mostrando que no es el resultado de las elecciones lo que preocupa al mercado, como acaso se podría pensar meses atrás. No es un efecto AMLO, más bien lo que ha sorprendido son los brillantes datos para la economía estadounidense. Eso modificó el rumbo del escenario cambiario. 

Estos datos fueron respaldados por la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed), que reforzó esta ruta de incrementos en la tasa de interés. En el anuncio este miércoles también se habló de cuatro alzas más para este año y dos para el 2019, poniendo en desventaja el mercado de otras economías, como la mexicana.

Otras decisiones en Estados Unidos hacen que los stakeholders analicen la conformación de sus portafolios en mercados de riegos. En la mira están las medidas proteccionistas que Donald Trump siga imponiendo. Sólo por poner un ejemplo: El Presidente de EU podría anunciar mañana más aranceles en importaciones chinas por un monto de 500,000 millones de dólares. 

En lo que va de 2018, el peso mexicano lleva una devaluación de 4.9% frente a la divisa estadounidense. La tendencia comenzó en abril. La constante opinión de los especialistas es que no responde a un tema doméstico, sino a un fenómeno mundial.

"Eso, sin dudas, incidirá de manera negativa en el peso y en otras monedas", consideró Alejandro Saldaña, analista de Grupo Financiero Ve por Más, en diálogo con La Política Online. 

A estos factores, habrá que añadir la incertidumbre -acaso en menor medida pero ya de manera casi permanente- por la falta de una salida clara para las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte que todo apunta a que este año, no llegará.

Aún así, en este escenario, la moneda mexicana no es la divisa más golpeada en la región. Por ejemplo, en América Latina, de las monedas más importantes, Argentina se ubica como una de las más desfavorecidas por el crecimiento del dólar estadounidense. De hecho, a nivel de países emergentes, también es la más golpeada. En lo que va del año, el dólar ya creció hasta 50.2% frente al peso argentino.

Este jueves, el dólar subió 60 centavos al arranque de la jornada, respecto a la cotización de la jornada anterior. La divisa argentina se cotizó en los $27 por billete verde. Eso junto a una inflación incontrolable, con un avance de hasta 12% en los últimos cinco meses.

En Argentina, existe poca credibilidad en el mercado hacia el presidente del Banco Central de ese país, Federico Sturzenegger, cuya política es considerada errática e inoportuna y de poca claridad.

Brasil también muestra una depreciación importante que alcanzó el 27% en su moneda, conjugándose con la caída de su Bolsa. En esta incertidumbre, los especialistas de este país aún se preguntan el rumbo que tomará el Real.

En este país, el tema interno también pesa mucho, pues en octubre celebrarán elecciones, pero a diferencia de México, aún no es claro el rumbo que decidirán los electores, mientras que continúa el conflicto social, que recae principalmente en la huelga que llevaron a cabo transportistas días atrás.

México también enfrentará un proceso electoral, y resulta más afectado, a diferencia de otros países de la región, de las medidas del TLCAN. Pero el especialista de Ve por Más recuerda que un factor que evitó una mayor caída del peso fue la expectativa positiva que tenían aún los inversionistas de que en mayo habría un acuerdo, al menos inicial, para el acuerdo TLC.

Por su parte, el economista Alejandro Zamora de Consultores Internacionales, señaló que a diferencia de estos países, México cuenta con fundamentales importantes, como estabilidad macroeconómica, buena política monetaria y elevado nivel de reservas internacionales, finanzas públicas responsables y menor exposición de deuda en dólares.

"Esas son razones por las que el impacto puede ser marginal en el corto plazo, pero algo es cierto, en el mediano se puede advertir un nuevo nivel del tipo de cambio, habrá que esperar a que concluyan elecciones y los factores coyunturales de política comercial", agregó.

Saldaña también coincidió que aún no es posible descartar más choques para la moneda. Los analistas ya están revisando sus proyecciones para el tipo de cambio al cierre del año, sin embargo, se muestran precavidos, pues para ese entonces, las cosas podrían pintar muy diferentes a como se ven al cierre del primer semestre de 2018.

Por lo pronto el mercado estará atento a la decisión que anuncie el Banco de México, muy probable es que venga un incremento de 25 puntos base para la tasa de interés. Pero lo que más interés provocará, será el comunicado en donde se explique su visión respecto a los indicadores macroeconómicos.