Voto 2018

Análisis: ¿Cómo impacta el plan de cortarle las manos a los criminales en la campaña del Bronco?

Logró su cometido: estar en boca del elector. Se coloca entre un público silencioso que está de acuerdo con la medida.

El debate presidencial se presentó para "El Bronco" como una oportunidad de estar por primera vez ante los reflectores de gran parte de la población. Analistas concordaban que Jaime Rodríguez iba buscar llamar la atención del elector y lo consiguió al presentar una propuesta que ha causado eco: amputar la mano de aquel funcionario que robe del erario público.

Pese a ser desestimado por presentar una idea por demás alejada de los principios a los derechos humanos, "El Bronco" logró su cometido: estar en la boca del elector. Su labor ahora deberá ser permanecer en ese reflector e intentar permear en el público antisistémico. "No debe desestimarse el potencial que tiene Jaime aunque diga cosas ilógicas", señaló a LPO Salvador Borrego, presidente de SABA Consultores.

Borrego ha señalado que será durante las próximas semanas cuando se pueda hacer una valoración de cómo ha afectado el debate presidencial en la preferencia electoral, sin embargo, asegura que el Bronco atrae sectores importantes de la población y puede llegar a robar votos de cualquier otro candidato, no sólo de López Obrador como se ha creído.

Tres momentos fueron claves para que Rodríguez Calderón se posicionara la noche del domingo: su iniciativa de "mochar" manos, la exposición de inseguridad de la cual ha sido blanco él y su familia, y sus constantes ataques al candidato de Morena.

Pese a que mucha de su discursiva fue un esquema fundamental y ya bien conocido durante su campaña a la gobernatura de Nuevo León y parte de su mandato, representa un estilo de charla fresco y nuevo en la perspectiva nacional que apenas voltea los reflectores hacia él.

"Jaime puede llegar a los dos dígitos, no sólo a partir del debate, sino desde su campaña, es un tipo atractivo", apunta Borrego. El tema de amputar manos fue una punta de lanza para estar en boca del elector, uno de los movimientos más clásicos de la política electoral. Jaime lo entiende: el polémico tema es una propuesta que se divide entre los que están de acuerdo, los que están en desacuerdo, y el sector de la población que presenta un hartazgo ante la corrupción y apoya la idea de manera silenciosa.

Al interior del war room del independiente planeaban desde la semana pasada llegar a estas fechas a los dos dígitos en las encuestas, situación que será valorada en los próximos días. Lo cierto es que el equipo coordinado por Memo Rentería encontró entre las impopulares frases del Bronco la posibilidad de seguir creciendo bajo el esquema de utilizar la polémica durante sus recorridos y los siguientes debates para continuar en la boca del elector, y poco a poco transformarse en el personaje sólido rumbo a Los Pinos.

Cabe recordar que Jaime lo logró tres años atrás en Nuevo León. Será el tiempo el que exponga qué tan lejos puede llegar el gobernador con licencia.