Voto 2018

Márquez y Domínguez operan para que ningún gobernador panista defienda a Anaya

Las presiones de Fernando Galindo. Lenta ejecución del presupuesto.

Desde ayer Damián Zepeda insiste en sus llamadas a gobernadores panistas para lograr una foto con Ricardo Anaya en la cual se pueda comunicar que los mandatarios estatales del PAN respaldan al candidato presidencial frente a los embates de la PGR. Por ahora la gestión no es exitosa, de hecho, práticamente ningún gobernador quiere una foto con Anaya.

Esto está alimentando teorías y especulaciones en el CEN panista. La principal: que Fernando Galindo, subsecretario de Egresos de la SHCP, ha llamado a los gobernadores para avisarles que cualquier alineamiento con Anaya equivaldrá a una demora mayor en la recepción de sus respectivos recursos.

El presupuesto se está ejecutando con extrema lentitud. Es algo que se comenta incluso entre gobernadores del PRI deseosos de presupuesto para la campaña. Marco Antonio Mena, gobernador tricolor de Tlaxcala, estuvo con este tema durante todo el cumpleaños de José Antonio Meade, la semana pasada.

Zepeda cree que Galindo tiene dos operadores entre los gobernadores panistas en las figuras de Francisco Domínguez (Querétaro) y Miguel Márquez (Guanajuato). Estos estarían guiando a los demás bajo laadvertencia de que no habrá recursos si hay foto con Anaya y que además el candidato ya se cayó al tercer lugar, por debajo de Meade.

Domínguez y Márquez tienen otro argumento un tanto más inconfesable: saben que si Anaya se desploma, una vez pasada la presidencial, ellos serán actores cruciales en el futuro del panismo. Son además gobernadores de cierta pureza ideológica, una clara identidad panista que no ven en Anaya.

A esto se suma que Domínguez está bien al tanto de la trama patrimonial de Anaya que tiene su origen en el estado que actualmente gobierna.