Voto 2018

Anaya avisa que no se bajará de la elección y no descarta acudir a la justicia internacional

Dice que es un perseguido político. Sus operadores buscan un diálogo con Los Pinos. "Voy a ganar", afirmó.

La bomba explotó. Bastó una conferencia de prensa y la denuncia anónima de dos personas a través de su abogado para que el segundo lugar de la contienda electoral se tambalee. Así, Ricardo Anaya está inmerso en un escándalo por supuesto lavado de dinero por la compra-venta de un terreno en un parque industrial de Querétaro.

Luego de que se supiera que un juez federal negó la suspensión definitiva que solicitó su presunto operador, Manuel Barreiro, y con ello habilitó a la PGR para solicitar la detención de quien se encuentra hoy en Canadá, el candidato del Frente intensificó el combate.

"Sí lo estamos valorando". Así respondió Anaya Cortés al no descartar acudir a instancias internacionales -como la Corte Interamericana de Derechos Humanos- por los ataques de los que está siendo objeto, y de los cuales responsabilizó al gobierno federal y al PRI. Por lo que admitió que se siente como un "perseguido político". "Para qué les repito lo mismo", añadió.

"Lo que les puedo decir con toda claridad son dos cosas -continuó el panista-: la primera, ya salió el peine, es una cortina de humo para tapar la corrupción de Meade cuando era secretario de Desarrollo Social, los desvíos de más de 500 millones de pesos. No hay casualidades. Y segundo, si el cinco por ciento de estas mentiras fueran ciertas, entonces por qué no procede en mi contra la PGR y el SAT".

Tras la presentación del Informe "La escuela que queremos" de Mexicanos Primero (donde se comprometió a que -en caso de llegar a Los Pinos- perfeccionará la Reforma Educativa, la cual dijo requiere de "un ajuste permanente"), respondió a quienes piden su renuncia como postulante a la presidencia de Por México al Frente: "Les aseguro que el 1 de julio de 2018 voy a ganar de manera contundente, la gente no va a creer esta bola de mentiras", sentenció, y negó que exista un Plan B.

"En política no existen las coincidencias. El PRI está estancado en un muy lejano tercer lugar y está haciendo todo lo posible por destruirme a base de mentiras, a base de calumnias y engañando a la gente... El único objetivo es político, lo que quieren es dañarme", finalizó.

Estas declaraciones contrastan con el tono conciliador con el que el equipo de Anaya intenta encontrar un puente con Los Pinos. Como ya lo reveló LPO, el primero a quien acudieron fue Miguel Ángel Osorio Chong. El objetivo no es otro:  frenar las operaciones en su contra.