Gil Zuarth: "El acuerdo de Corral y Navarrete muestra cómo se manejan las causas penales en México"

"La insoportable fragilidad de nuestro estado de derecho: dos gobiernos pactan, a cambio de 900 millones de pesos, los términos del procesamiento de causas penales. Luego no nos quejemos de nuestro subdesarrollo", escribió el sábado por la noche el senador panista rebelde Roberto Gil Zuarth en su cuenta de Twitter.

Con este mensaje, el legislador cuestionó el anuncio de un acuerdo entre el Gobierno federal y el gobierno de Javier Corral, justo cuando su Caravana por la Dignidad llegó a la Ciudad de México. "La insoportable fragilidad de nuestro estado de derecho -continuó-: dos gobiernos pactan, a cambio de 900 mdp de presupuesto, los términos del procesamiento de causas penales. Luego no nos quejemos de nuestro subdesarrollo".

A este acontecimiento, al cual Gil Zuarth identificó con una "manipulación política de la justicia", el militante albiazul lo bautizó como el "pacto político en Bucareli", por la firma del Secretario de Gobernación: "Disección de nuestra desgracia: las extradiciones y la aplicación de la ley se transigen en caravanas y en pactos nocturnos. La ley tiene precio en este país: 900 mdp 'en las próximas semanas '".

"Lo que ese acuerdo dice en sus letras es: 900 mdp a cambio del traslado de un acusado (vinculado a proceso y bajo la custodia de un juez) y de la práctica del protocolo de Estambul (que es una obligación de la autoridad y un derecho de las personas). Vamos, hasta perito pactaron", publicó el senador. Y añadió: "El poder Ejecutivo, federal y local, no puede intervenir en forma alguna en el proceso penal que se le sigue a una persona. El gobernador no 'invita', ni debe decidir sobre la condición o destino judicial de nadie. Ni por 900 mdp".

Esto fue reafirmado hoy por el legislador blanquiazul en entrevista con Luis Cárdenas, en donde insistió en fustigar el pacto entre Javier Corral y Alfonso Navarrete Prida. "El acuerdo viola la ley... No veo en el documento ningún mérito. Veo violación a la ley, y veo que la gran oportunidad de darle una sacudida al federalismo se ha perdido".

"Este acuerdo no tiene porqué celebrarse", agregó Roberto Gil Zuarth. Y concluyó: "Se viola la ley porque los gobiernos no se pueden poner de acuerdo con las causas penales... Una persona detenida es cambiada de penal por un acuerdo político entre dos gobiernos, como si esa perdona no estuviera bajo un proceso".