Con una histórica inversión, Petrobras busca dejar el escándalo atrás
Brasil está decidido a volver a la primera línea del petróleo global con una masiva inversión en su mega yacimiento Pre-Salt, ubicado frente a las costas de los estados de Río de Janeiro y San Pablo.
En sus presentaciones ante los inversores en Wall Street Petrobras dejó en claro ese objetivo, que incluye para este año la puesta en funcionamiento de ocho nuevas plataformas petroleras en el área, un récord histórico para la estatal brasileña. Hasta ahora el año con mayor inversión en esa área había sido el 2014, con la puesta en marcha de cuatro nuevas plataformas.
Las construcciones se reactivaron luego que la estatal cediera parte de la construcción de plataformas a China. Cada nueva plataforma tiene la capacidad de producir 150 mil barriles diarios, así que teóricamente juntas podrían sumar a Petrobrás 1.2 millones de barriles, aunque los cálculos de la compañía brasileña son más conservadores, por la infraestructura submarina anexa que se necesita para sacar una producción de ese tamaño.
La apuesta de máxima es llegar a sumar para el 2022 casi un millón de barriles y pasar de la producción actual que ronda los 2.6 millones de barriles a 3.5 millones, como explicitó la compañía en su plan de negocios 2018-2022. Petrobras dejó en claro en ese documento que el foco central de su inversión será exploración en aguas profundas, donde prevé destinar el 66% de las inversiones.
El petróleo que se obtiene de esos yacimientos es de alta calidad y exigen el desarrollo de una tecnología de frontera por la profundidad en la que se encuentra, que llega hasta los 6,000 metros.
Pero el esfuerzo vale la pena, el Pre-Salt representa el 51% de la producción de la compañía, que en los últimos tiempos inició un fuerte proceso de mejora de su perfil de deuda, baja de costos y asociaciones con privados, para tratar de dejar atrás todo el escándalo del Lava Jato y el Petrolao que drenaron su reputación en los mercados.
"Los resultados del Pre-Salt son buenos, los pozos dan muy bien, es lógico incrementar la actividad en el área", afirmó a LPO un experimentado operador petrolero, que confirmó que "el problema de Petrobras es institucional, el mercado les perdió la confianza", pero estimó que esta situación "va a pasar y Brasil volverá".
Respecto al efecto que podría tener en el mercado regional semejante aumento de producción de la petrolera brasileña, analistas consultados no ven mayores cambios, salvo si en algún momento Brasil empieza a producir gas en serio. En ese caso se puede prever un impacto en las ventas de Bolivia a la Argentina.