Banco central

Díaz de León pide continuar reformas y reforzar estado de derecho tras 2018

El flamante gobernador del banxico consideró que es el mecanismo para enfrentar embates a la economía.

 El mercado financiero estará sometido en el corto plazo, a una fuerte incertidumbre que ya nadie puede negar: desde las elecciones presidenciales, pasando por las decisiones de política fiscal y monetaria en Estados Unidos, hasta el desenlace de las negociaciones del TLCAN. En medio de ese escenario Alejandro Díaz de León, nuevo gobernador del Banxico, debe continuar con la misión de regresar la inflación a los niveles de 3%.

Se dice consciente de que la economía no ha crecido a los ritmos esperados y que los embates vendrán por varios frentes -incluyendo menor confianza del consumidor y de los empresarios en cuestiones de inversión- lo que se traducen también en retos importantes para mantener estables los precios al consumidor.

En ese contexto, y siguiendo el discurso de su antecesor Agustín Carstens, el nuevo gobernador también considera que uno de los retos más grandes para reforzar la economía mexicana gira en torno al estado de derecho, pero agrega también la necesidad de continuar las reformas estructurales para asegurar la llegada de las inversiones.

"Esta desregulación y apertura a la inversión propician mayor crecimiento y productividad. Uno de los primeros elementos es perseverar en esa línea. Otro es el estado de derecho. Así como la planeación a largo plazo, que a veces es el talón de Aquiles. Es importante tener planes, sobre todo en infraestructura, con un horizonte claro y que se den pasos consistentes en ese sentido".

Entrevistado por el diario La Jornada, Díaz de León defendió también las decisiones de alzas de tasas y su impacto en la economía. Reconoció que tenían un impacto negativo en el corto plazo pero agreta que "la comparación correcta es qué hubiera pasado si no se suben las tasas y se hubiera desatado un periodo de inflación más alta. En ese caso, el aumento de tasas necesario para regresar la inflación a la meta hubiera tenido que ser mucho mayor.

En ese sentido, justifica no sólo esta decisión, sino también la acción paralela de Hacienda de reducir el déficit fiscal: "La economía mexicana se enfrenta a un ciclo económico muy atípico, con choques de diversa índole y un entorno particularmente complejo. Por eso, afirma, la estrategia ha sido redoblar el anclaje macroeconómico para que el tránsito por este entorno adverso sea lo más ordenado posible. Si se hiciese de otra manera, eventualmente el ajuste tendría que ser mayor. Por eso, la estrategia ha sido redoblar en términos de estabilidad, con políticas monetaria y fiscal restrictivas y siendo muy cautelosos y prudentes de que la solvencia del sistema financiero esté en su lugar.