TLCAN

Reglas de origen: Guajardo confirmó que México no tiene contrapropuesta para lo que pide Trump

Descartó que elecciones determinen las negociaciones.

De cara a la sexta ronda de negociaciones del TLCAN, México aún no tiene una contrapropuesta para uno de los temas más controversiales: las reglas de origen para el sector automotor. Ildefonso Guajardo justificó que necesitan "entender" la propuesta de Estados Unidos.

El  Gobierno de Donald Trump - y un equipo comandado por Robert Lighthizer- apuesta por que el 85% de los vehículos tengan autopartes de la zona de Norte América y dentro de ese porcentaje, que un 50% sea exclusivo de Estados Unidos.

Ya desde la tercera ronda, el secretario de Economía exigía a su equipo negociador poder hacer una contraoferta a la de Lighthizer, pero la creatividad que pedía no apareció en las rondas subsecuentes. Lejos de eso, los representantes del sector se concentraron en cuestionamientos.

Este miércoles, desde Washington, Guajardo confirmó que el equipo mexicano no tiene aún una contrapropuesta, pero justificó que es porque necesitan primero "entender la propuesta de Estados Unidos en términos de tecnicismos".

Prometió que a partir de eso, el equipo mexicano podrá definir lo que se hará para contrarrestar las propuestas "que eventualmente pondremos sobre la mesa", dijo en una conferencia de prensa luego de una jornada de reunión con diversos senadores estadounidenses

Y asume las dudas de su equipo, con un tinte crítico: "Parte de la estrategia es en lugar de contraproponer (en reglas de origen), preguntar. ¿Cómo se llega a un 85 por ciento de integración técnicamente? ¿Cómo puedes hacer una transición en dos años del 62 al 85 (por ciento de contenido regional), cuando sabemos que el modelo 2018 ya está producido y el 2019 ya está prácticamente listo?", cuestionó. 

En ese tenor consideró que la transición (en reglas de origen) por sí misma es poco probable (...). Una transición en dos años es enteramente irreal". 

Por otro lado, fue muy cuestionado por los tiempos electorales, tanto en México como en Estados Unidos, pero el funcionario federal descartó por completo que pudieran afectar el calendario de las negociaciones. 

Explicó que en las reuniones con los congresistas estadounidenses el tema de calendarios y procesos electorales fue abordado, pero aseguró que el análisis fue solo en torno a cómo interactuarán estos elementos en el proceso, "más que definir calendarios". México entrará en tiempos electorales desde mayo hasta finales de junio y en Estados Unidos terminará hasta noviembre. 

"Esta negociación tomará el paso que sea necesario.  Están los incentivos para que se resuelva sin que se traslape con procesos críticos y conscientes de que tendremos la sensibilidad sobre el debate electoral.