ASIA

En China apareció un Trump generoso y amigable

Alabó a su amigo Xi Jinping y dijo que no podía culparlo de las prácticas poco éticas del gigante asiático.

A su paso por China Donald Trump fue objeto de una recepción de lujo con desfile militar y saludo con cañones. El mandatario ha mostrado un tono muy diferente al que utilizó durante la campaña, cuando acusó al gigante asiático de "violar" a Estados Unidos en una guerra económico que, a su parecer, China va ganando. Sin embargo, desde hace meses Trump ha entablado una relación muy cordial con el presidente Xi Jinping, a quien ha dicho que admira y respeta, y para quien tuvo extrañas palabras de felicitación tras consolidar su poder durante la más reciente convención del partido comunista chino.

En su discurso Trump dijo que no podía culpar a ningún país "por ser capaces de tomar ventaja de otro país para beneficio de sus ciudadanos", refiriéndose a las prácticas comerciales que han permitido a China tener un déficit con Estados Unidos de varios miles de millones. "Fue un poco irónico", explicó más tarde el canciller Rex Tillerson las palabras de su jefe. Durante la visita se firmaron varios acuerdos comerciales entre ambas naciones con un valor de 250 mil millones de dólares, una práctica tradicional cada que un presidente norteamericano visita China.

Trump criticó a los líderes estadounidenses del pasado que permitieron que el déficit comercial con la nación asiática creciera a niveles incontrolables.

Xi replicó una estrategia que ya antes le funcionó al rey de Arabia Saudita y al presidente francés Emmanuel Macron: bañar al presidente norteamericano en ceremonias y desfiles para ganarse su favor.

Donald y Melania Trump en China

Por su parte, el mandatario chino se comprometió a lograr la desnuclearización de Corea del Norte. Trump pidió públicamente que China "trabajara duro" para lograr un acuerdo con el líder norcoreano.

Más tarde, durante una cena de Estado ofrecida en honor a Trump, se proyectó un video con los grandes éxitos de la relación Trump-Xi, quien hace unos meses visitó la Casa Blanca y el club de golf del mandatario en Florida. Aparecieron imágenes de esa visita y del encuentro de ambos líderes en el G20. También, según reportes de CNN, hizo una aparición la nieta de Trump cantando una canción en mandarín en la Oficina Oval. 

Trump viajará a Vietnam el 10 de noviembre, donde tendrá lugar la reunión de Cooperación Económica Asia-Pacífico, a la que también asistirá Enrique Peña Nieto, y después visitará Filipinas, donde gobierna el radical Rodrigo Duterte, quien ha lanzado una brutal guerra contra los consumidores y vendedores de drogas que ha resultado, según cálculos de organismos internacionales, en miles de ejecuciones extrajudiciales. Trump ha alabado en varias ocasiones a Duterte.