Margarita Zavala se reúne con empresarios en Nuevo Léon: tantea apoyos para ir por firmas
El destino inmediato de Margarita Zavala se está decidiendo en las próximas horas en una reunión en San Pedro Garza García, donde la ex primera dama ha convocado a diferentes hombres de negocios que avalan su candidatura. El encuentro fue organizado de último minuto por el ex gobernador Fernando Canales, que ha ganado fuerza en el entorno de Zavala.
En esta cumbre Zavala busca saber si tiene los apoyos necesarios para iniciar la odisea de buscar las 900 mil firmas necesarias que habilitan la nominación independiente. Los empresarios regiomontanos han sido partícipes desde el inicio del proyecto de la ex primera dama en gran parte porque muchos de ellos hicieron cuantiosos negocios en el sexenio de su marido Felipe Calderón.
Los últimos meses de esta relación electoral no fueron lo mejores porque se había instalado en el Grupo de los 10 que la campaña de Zavala estaba estancada, sin un rumbo demasiado claro, o al menos eso escuchó su hermano Juan Ignacio, que es su principal consejero. Debe decirse: existe un fuerte escepticismo sobre las encuestas que dicen que Margarita arrastra una intención de voto del 24%.
El encuentro se vio precipitado porque desde Los Pinos había llegado la respuesta de que no habría apoyo para juntar las firmas por temor a que una candidatura de Zavala podría partir en tres al voto sistémico.
Los hombres de negocios quieren saber dos cuestiones que les preocupan: en primer lugar qué llegada tiene Zavala a los gobernadores panistas y si estos, distanciados de Anaya, podrían avalar la búsqueda de firmas. Se conoce que por estas horas en esa liga las cartas más rutilantes son Francisco Domínguez de Querétaro y Miguel Márquez de Guanajuato.
En segundo lugar, se impone como una necesidad crucial, conocer el estado de situación de Calderón con Enrique Peña Nieto. Esto porque la PGR en manos de Raúl Cervantes no ha destapado el caso Odebrecht que podría dañar la imagen del ex presidente. Nadie se quiere embarcar en una candidatura que esté en riesgo de ser herida de gravedad en su fase inicial.