Republicanos en el Senado avanzan hacia la destrucción de Obamacare
Tras dos fracasos previos en el Senado y uno en la Asamblea de Representantes, los Republicanos en la cámara alta finalmente pudieron dar un primer paso rumbo a la abolición de Obamacare, la ley de salud pública que llevan siete años atacando y para la que todavía no tienen un reemplazo viable.
En un episodio digno de novela del realismo mágico, los senadores republicanos aprobaron abrir el periodo de debate para discutir los cambios a la ley de salud. Sin embargo, los líderes en el Senado no especificaron cuál es la ley que se va a debatir.
En este momento existe la versión de la American Care Act como salió de la Asamblea de Representantes; existe también la edición hecha por McConnell y un puñado de senadores más; y por último existe una propuesta para eliminar de tajo Obamacare sin presentar un sustituto. Nadie sabe qué fue lo que votaron hoy.
La estrategia estaba destinada para convencer a ciertos senadores republicanos que ya se habían negado a votar las alternativas propuestas. Sea cual sea, las ediciones propuestas dejarían sin seguro de salud entre 23 y 33 millones de personas, según reportó la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Dos senadoras republicanas mantuvieron su rechazo a abrir el debate, la senadora de Alaska Lisa Murkowski y la senadora de Maine Susan Collins. Todos los demócratas votaron en contra, por lo que el marcador quedó 50 por el sí y 50 por el no, con el voto del vicepresidente Mike Pence los republicanos lograron romper el desempate.
El senador por Nevada Dean Heller, uno de los que se había inclinado por el "no" en los últimos meses, finalmente cedió a la presión de su partido y del líder Mitch McConnell y voto por el sí, a pesar de que probablemente le costará su asiento en la cámara alta durante la próxima elección.
Tras la votación de este marte sigue un debate de 20 horas, 10 para los demócratas y 10 para los republicanos. De acuerdo con las reglas parlamentarias, cualquier debate sobre una enmienda puede durar sólo dos horas, y sobre una enmienda a una enmienda sólo una hora.
Es probable que sea en este punto en que los republicanos agreguen una enmienda para aprobar una eliminación absoluta de Obamacare como existe al día de hoy. De acuerdo con senador del ala libertaria Rand Paul, McConnell lo convenció de votar por el sí al debate cuando le aseguró que el plan era adoptar la ley para repeler Obamacare que redactaron en 2015.
Paul y otros ultraconservadores han rechazado en repetidas ocasiones aprobar una versión lite de Obamacare. Su misión ideológica es acabar con todos apoyos de dinero federal para gastos en salud.
Después de que concluya el debate inicia un proceso apodado vote-a-rama, en el cual los senadores votarán directamente por las enmiendas propuestas a la ley en cuestión, aunque también pueden agregar nuevas enmiendas a estas alturas.
Según las reglas, dependiendo del tipo de enmienda es la cantidad de votos requeridos para aprobarlas. Por ejemplo, algunas de carácter presupuestal que ya hayan sido evaluadas por la Oficina de Presupuesto del Congreso, sólo requieren 52 votos para ser aprobadas; pero otro tipo de enmiendas pueden ser desafiadas ante los llamados parlamentarios del Senado, quienes se encargan de vigilar que las reglas de votación estén siendo respetadas. En dichos casos se necesitarían 60 votos para aprobar la enmienda, que sin el apoyo de los demócratas serían imposibles de conseguir.
Después de que se aprueben todas las enmiendas a la ley, se hace otra votación en el pleno. Si 50 senadores aprueban la nueva versión con cambios, el Senado la envía de regreso a la Asamblea de Representantes, donde tendría que volver a ser aprobada para después ser enviada a la Casa Blanca, donde Donald Trump finalmente la firmaría.
El presidente tomó el anuncio de hoy como un triunfo. Durante una conferencia de prensa a propósito de la visita del primer ministro libanés, Trump dijo que la aprobación del debate era un gran paso: "Ahora nos movemos hacia adelante rumbo a un sistema de salud verdaderamente grandioso para el pueblo americano".
En Twitter el presidente agradeció que el senador John McCain regresara temporalmente al Senado sólo para votar la propuesta de hoy. La semana pasada se supo que McCain ha sido diagnosticado con un agresivo cáncer en el cerebro.