Pronóstico

Con cautela, el FMI sube su proyección de crecimiento para México en 2017

El organismo internacional vuelve a acercarse al 2% tras resultados del primer semestre. Los factores.

Desde que en abril la Secretaría de Haciendo dio a conocer un crecimiento económico por arriba de lo esperado han comenzado una serie de alzas en las expectativas de los principales organismos. Ahora le tocó el turno del FMI. Pero hay que decirlo: se trata más bien de una moderación del pesimismo reinante en los últimos meses, más que un optimismo sólido.

El Fondo Monetario Internacional apuntó en su Perspectiva de la Economía Mundial una proyección de crecimiento en la economía mexicana de 1.9%, desde su último reporte que era de 1.7%. Un leve aumento que refleja quizás el paso una severa tormenta que instaló incertidumbre y dudas.

El organismo que encabeza Christine Lagarde venía en realidad de hacer una serie de recortes, pues para junio empezaba a alejarse del 2%, teniendo en cuenta principalmente el panorama de la economía estadounidense.

En esta ocasión, sin embargo, analizó dos temas. Por un lado, resaltó la fortaleza de la actividad económica en el primer trimestre del año y por otro lado, una política fiscal en Estados Unidos no tan expansiva como se había pronosticado.

 "Si bien el cambio de perspectivas para 2017 refleja en parte la debilidad del crecimiento durante el primer trimestre del año, el principal factor de las revisiones, sobre todo la de 2018, es el supuesto de que la política fiscal no será tan expansiva como se había pensado, teniendo en cuenta la incertidumbre que rodea los plazos y la naturaleza de la recalibración de dicha política", indicó el FMI. 

Este corrección en las estimaciones del FMI se suman al alza en la calificación crediticia que anunció Standard and Poor's para la nota soberana de México, en la que pasó su evaluación de "Negativa" -otorgada hace un año- a "Estable".

Esta noticia se reflejó automáticamente en la fluctuación del peso. Según S&P, el país podrá estabilizar su deuda.  Cuando en agosto de 2016 la calificadora redujo la nota mexicana,  se habían pendido luces amarillas en el Gobierno. La razón principal estaba enfocada el deterioro de las finanzas y el alto riesgo que se avizoraba ante el triunfo de Donald Trump.

La respuesta del secretario de Hacienda, José Antonio Meade, fue celebrar la nueva calificación a través de un artículo en el diario Milenio, donde utilizó el espacio para referirse a la "irresponsabilidad fiscal", la cual tiene efectos negativos en nuestro país:

"La responsabilidad fiscal no da frutos inmediatamente, se requiere un esfuerzo sostenido y perseverante para empezar a cosechar. Desafortunadamente, la irresponsabilidad fiscal sí tiene impactos inmediatos y por lo tanto el esfuerzo de muchos años se puede perder en un instante político. Por esta razón, los mexicanos debemos aquilatar el patrimonio que constituye nuestra reputación de responsabilidad, que se ha construido durante décadas, requiriendo de un enorme sacrificio de parte de todos", escribió el titular de Hacienda.

Hoy, este nuevo mensaje del FMI se suma al anuncio que una optimista Christine Lagarde dio en abril pasado: "La primavera está en el aire pero también en la economía. Estamos viendo por fin un momentum de crecimiento global y esperamos poder sostenerlo en el mediano y largo plazo", expresó la gerente del organismo financiero durante las Spring Meetings que encabezó con los Secretarios de Finanzas de los países asociados.