Congeso

Osorio y Cervantes comparecieron 6 horas en el Congreso por las denuncias de espionaje

Se presentaron antes la Bicameral de Seguridad. También fueron el jefe del Cisen y Renato Sales.

Después de varias semanas de negociaciones, finalmente la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional recibió a varios funcionarios de primer nivel del Gabinete para pedirles información en torno a las denuncias de espionaje con el ya célebre software Pegasus, que según la información del New York Times habría sido utilizado para vigilar a periodistas, opositores y activistas. 

A la junta no faltó nadie. Estuvieron Miguel Ángel Osorio Chong, Raúl Cervantes, el jefe del Cisen Eugenio Imaz y el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales. Las cabezas del gabinete de Seguridad de Peña Nieto estuvieron en pleno. También se hizo presente José Antonio González Anaya, a quien citaron para indagar sobre los operativos contra los "huachicoleros".

La Comisión Bicameral es presidida por el diputado perredista Waldo Fernández, y está integrada por los senadores Ismael Hernández (PRI), María del Rosario Guzmán (PAN), Luis Humberto Fernández (PT-Morena), así como a los diputados federales Enrique Jackson (PRI) y Jorge Ramos (PAN).

"Agradezco la disposición y colaboración que tuvieron durante la intensa reunión de trabajo de más de seis horas, la cual se dio en un diálogo abierto, sin límite de preguntas y tiempo, y en la cual se tocaron los temas relativos a la intervención de telecomunicaciones y robo de hidrocarburos", dijo Waldo Fernández al concluir la cita, siempre cuidando las formas pues la comisión guarda una estricta cláusula de privacidad.

El diputado concluyó: "Esta reunión de trabajo sirve para fortalecer a las instituciones del Estado e incorporar la materia de ciberseguridad en el marco jurídico que rige la seguridad nacional, así como para fortalecer las atribuciones de la Comisión Bicameral como responsable del control y evaluación de las políticas en materia de seguridad nacional".

La Política Online había adelantado que la comparecencia de los funcionarios había desatado una serie de pujas entre los partidos. Furioso por Coahuila, Ricardo Anaya habría bajado la orden a Jorge Ramos para que eleve el nivel de confrontación al interior de la Comisión. La idea era imponer que la audiencia tenga un registro estenográfico, poniendo en entredicho el nivel de privacidad que marcan las leyes.

Consciente de estas tensiones, Enrique Jackson recomendó en altas instancias del gobierno federal que el tema se de por concluído con la renuncia de funcionarios intermedios de PGR y de Segob. El diputado trae la idea de que es la única forma de preservar a la administración de un escándalo que genera más daño fuera que dentro del país.