El entorno de Josefina cree que algunos caciques "se llevaron la lana" para controlar las casillas

Las internas en el PAN del Estado de México están en su momento más delicado después de la derrota de Josefina. Los pases de factura, las peleas para ver quién tuvo más culpa y quién debe encarar el proceso de reconstrucción de cara a 2018, configuran una escenario complejo.

Margarita ya salió por todos los medios de comunicación a culpar de frente a Ricardo Anaya. Moreno Valle, más cercano a las operaciones por tierra, prepara una rebelión con Ulises Ramírez para recuperar el control del Comité Directivo Estatal, hoy en manos de Víctor Hugo Sondón, aliado a Anaya.

Ulises es quizás el cacique que más fuerza le puede hacer a Sondón, cuyo máximo respalda es el alcalde de Naucalpan, Edgar Olvera. Pero hay otros liderazgos menores que salieron rápido a pedir la renuncia de Sondón, por haber estado al frente de la campaña de Vázquez Mota.

En un documento crítica, aparecieron entonces los nombres de Juan Rodolfo Sánchez, José Luis Durán Reveles, Juan Carlos Núñez Armas y Carlos Madrazo Limón, entre otros. "Son puros viejos locos que viven de sus glorias pasadas. Ex líderes territoriales que ya no manejan grandes estructuras", explicó una fuente mexiquense.

Como sea, los pases de facturas de algunos de esos líderes despertaron enojos en el entorno de Josefina. El primer apuntado fue Carlos Madrazo. Fuentes de los equipos de Vázquez Mota aseguraron que fue él quien diseño y operó la estructura electoral.

"Firma un documento que habla de errores en la estructura, y él fue parte de la campaña, se le dio un montón de lana para las casillas y no sabemos si se la llevó, porque nos faltaron como 2 mil representantes", explicaron a LPO.

La Política Online consultó a los equipos de comunicación del Comité Directivo, pero optaron por no echar más leña al fuego. "No vamos a responder a ese documento porque estamos empezando a reunirnos con todos los grupos para lograr la unidad", se excusaron.