Los Pinos piensa en desplazar a Escudero de la Mesa Directiva, en un gesto de tensión con Beltrones
Si de algo se le acusa al grupo más cercano de Enrique Peña Nieto es de no haber compartido el poder con el resto de los sectores del PRI. Las decisiones, los espacios de poder, todo se concentró en un círculo muy cerrado que dejó afuera a priistas de enorme recorrido. Ahora, una senadora muy cercana a Los Pinos opera para desplazar a Pablo Escudero de la Mesa Directiva, un movimiento que ya genera tensiones.
La presidencia de la Mesa Directiva se repartió entre las tres fuerzas políticas predominantes de forma proporcional. El PRI ocuparía ese lugar tres años, el PAN dos y el PRD uno. El blanquiazul ya utilizó sus turnos, con Ernesto Cordero y Roberto Gil Zuarth. El Sol Azteca hizo lo propio con Miguel Barbosa. Raúl Cervantes estuvo un año por el tricolor, que se reservó los últimos dos años del sexenio para cerrar sin contratiempos las legislaturas más picantes.
El segundo año de esas presidencias se cedió a Pablo Escudero, del Partido Verde. El gesto tuvo dos grandes objetivos. El primero, una señal hacia un aliado electoral muy importante para el PRI, en momentos en donde ya crecía el ruido y la marea en contra. Pero también un mensaje conciliador hacia Manlio Fabio Beltrones, que había abandonado la dirigencia nacional con profundas críticas. Escudero es el yerno del histórico líder.
Según pudo saber La Política Online, el acuerdo implicaba que Escudero se quedaría hasta diciembre, completando así los dos períodos ordinarios. Ahora, Cristina Díaz empezó la grilla en su bancada para desplazarlo y ocupar desde septiembre la presidencia de la Mesa Directiva.
La senadora ya cabildeaba para ocupar ese lugar en el último año de mandato. Pero ahora quiere estar en funciones para el debate del último presupuesto que se le apruebe al presidente Peña Nieto. Sabe que luego comenzará la campaña presidencial, y el Senado entrará en una parálisis lógica.
LPO reveló otras decisiones que pusieron en tensión el vínculo de Los Pinos con un amplio sector de la vieja guardia del PRI, como la propuesta de poner a José Murat al frente de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP). Finalmente, el multidenunciado ex gobernador fue corrido y en su lugar quedó Arturo Zamora.